jueves, 22 de agosto de 2013

Capítulo 9


No María, esto es para toda la vida, no puedes estar con Gonzalo queriendo a Dani.

Se oyó una voz al fondo.

-¡¡¡Pues claro que no quiere casarse con Gonzalo!!!- Gritó la extraña voz.-

Pensé que era Dani, pero no, era Inés, ¿qué está haciendo?

-Inés siéntate y cállate- Le ordenó mi padre.-

-No, María no puede...- En ese momento me acerqué y le tapé la boca.-

-Voy a hablar con ella y hacerle razonar, de paso voy al aseo que con los nervios...- Dije para salir de ahí.-

Fuimos hacia el jardín.

Narrado por Inés

No podía estar callada, no puedo ver a María sufrir de esta forma. No aguanté y me entrometí, María y yo nos fuimos a hablar al jardín.

-¿Qué? Al menos podrías dar las gracias, tú no quieres casarte con él- Dije indignada.-

María iba a hablar, pero la callé porque había oído unos ruidos, ¿de dónde venían?

Fuimos caminando lentamente y los ruidos venían de nuestro escondite, ¿quién puede ser?

-Inés, el ruido viene del escondite, ¿Quién es?- Dijo María asustada.-

-Pues no lo sé, se supone que ese lugar solo lo conocemos tú, yo y... ¡Carlos!- Dije emocionada.-

-Pues vamos.-

Fuimos corriendo hacia allí y estaban los dos, Dani y Carlos, después de tanto tiempo sin verles no me lo creo.

-Por fin aparecéis, creíamos que nos quedaríamos esperándoos todo el día aquí- Dijo Dani.-

-Eso jaja, ¿qué tal ha ido todo? Por cierto Inés, estás preciosa- Dijo Carlos.-

-¿Ido de qué? Me he encargado de que María no diga el “Sí quiero”; de nada y gracias Carlos, tu también- Le abracé, necesitaba sentirlo cerca.-

-Bueno, pero tenemos que volver dentro y ¿Qué diré?- Preguntó María abrazando a Dani.-

-Di que sí y ya está, no quiero que tengas más problemas- Dijo Dani y todos le pegamos en el brazo- Vale, vale, lo capto.-

-¿Y si no tiene que decir nada?- Dijo Carlos con cara de haber tenido una idea.-

-¿Qué quieres decir?- Pregunté confundida.-

-Quiero decir que nos vayamos lejos de aquí, donde nadie nos impida estar juntos.-

¿Irnos? Sí, es buena idea, pero sería dejarlo todo atrás. Pero quiero estar junto a él, lo tengo claro.

Narrado por María

Menos mal que los ruidos eran Dani y Carlos.

Fue increíble la alegría que sentí al verle de nuevo y abrazarle con todas mis fuerzas, no quería decirle que sí a Carlos, pero era mi deber hasta que a Carlos se le ocurrió la idea de fugarnos, no me parecía buena idea, me separaría de mi padre, de mi casa y pondría en peligro a todos por haberme enamorado de Dani y tener que comprometerme, todo es culpa mía... Me siento fatal. A Inés le parecía buena idea, se le notaba en la cara pero también estaba preocupada y no muy convencida.

-No creo que sea muy buena idea, iros vosotros y yo os cubro ya que todo esto es por mi culpa, no quiero poneros en peligro- Dije indecisa.-

-A mi me gusta la idea, pero es difícil- Dijo Inés.-

-Nada es por tu culpa, tú no tienes la culpa de enamorarte y que te obliguen a casarte con el hombre que no quieres, no es ponernos o ponerme en peligro, es hacerme feliz, necesito tenerte a mi lado María, estas semanas sin ti han sido durísimas, te quiero por favor vente- Dijo Dani acercándose a mi y me besó dulcemente.-

-Como le voy a decir que no a alguien como tú, claro que iré- Dije sonriente.-

-Entonces todo arreglado, podemos estar juntos sin que nadie nos moleste- Dijo Carlos acercándose a Inés para besarle.-

Se oyeron unos pasos y salimos a ver quien era, menos mal que eran David y Paula que venían de la mano y Jessica al lado.

-Hola chicos- Dije sonriente.-

-Hola, chicas os están buscando y quieres que vayáis dentro- Dijo David.-

-Pues no nos van a encontrar, hemos pensado en fugarnos ahora mismo para poder estar juntos sin que nadie nos moleste- Dijo Dani muy feliz, lo quiero.-

-¿Nos podéis cubrir?- Preguntó Carlos.-

-Claro que os cubrimos, pero ¿estáis seguros? ¿Y si os pillan? Tened cuidado- Dijo Paula y fue a abrazar a Carlos.-

-Carlos no te digo nada...- Dijo David celoso.-

-David, sabes que son hermanos, ¿no?- Dijo Jessica riendo.-

-Pues claro que lo sé.-

-No os preocupéis, tendremos cuidado y si nos pillan asumiremos las consecuencias- Dije.-

Nos despedimos y ya teníamos pensado como íbamos a salir para que no nos vieran, estaba un poco asustada y no es para menos, no podía evitarlo.

Narrado por Inés

Ya lo teníamos todo listo, ¿en serio nos íbamos a fugar? No me lo creo aún ni yo, por una parte quiero ya que estoy con Carlos sin tener que escondernos, bueno, eso de sin escondernos hay que verlo porque huir es esconderse; por otra parte no quiero, porque es dejar toda una vida atrás, ¿estaré preparada? No lo sé, pero si no lo intento nunca lo sabré.

Jessica, David y Paula nos podrían cubrir mientras nos vamos, pero ¿cuándo vean que no estamos? ¿Qué dirán? ¿Qué estamos muertas? Bueno ya pensaremos en eso cuando se nos presente.

David nos dio la señal de que podemos salir ya y así hicimos, una vez fuera cogimos nuestros caballos y nos fuimos.

 

{...}

 

Han pasado ya dos días desde que nos fuimos, vivíamos en una preciosa cabaña apartada un poco de la población, no me separaba de Carlos ni un minuto, aparte de que él no me dejaba y María con Dani igual. Ese día vino Paula con David y Jessica para hacernos una visita.

-Hola fugitivos- Bromeó David.-

-De fugitivos nada- Se quejó Dani- Sólo ser felices.-

-Lo que tú digas, pero todo el pueblo está buscando a Inés y María sin descanso- Dijo Paula.-

Bien, vamos bien, todo el pueblo buscándonos.

-No nos encontrarán mientras no salgamos de aquí- Dijo María segura.-

-¿Nos podemos quedar? Esta noche digo- Preguntó Jessica.-

-Sí, claro. Y David mucho ojo lo que haces por la noche con mi hermana- Dijo Carlos.-

-¿Yo? ¿Qué voy a hacer? No digas tonterías Carlos- Intentó salvarse David.-

Todos nos reímos.

Se hizo de noche y nos fuimos a dormir, a la mañana siguiente Carlos, David y Dani no estaban, ¿Dónde podrían estar? Les buscamos por toda la casa y nada, no aparecían.

De repente se abre la puerta de golpe y era David, venia corriendo.

-Chi... Chicas dijo como pudo cogiendo aire.-

-David, respira y dinos que pasa- Dijo Jessica.-

-Estábamos... En el pueblo para... Para comprar cosas y... Y nos ve el ejército de vuestro padre...- Nos contó David como pudo.-

-¿Y qué?- Preguntó María nerviosa.-

-Y salieron corriendo persiguiendo a Dani y a Carlos, les atraparon porque todos piensan que tienen algo que ver con vuestra desaparición- Terminó de contar David.-

Tras decirnos eso no sabíamos qué hacer, ¿qué les habrán hecho? Hay que volver ya, cogimos el caballo y volvimos a palacio.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Capítulo 8


Buscándola y buscándola me choqué con Gonzalo .

-¿Qué haces aquí?- Le pregunté intentando poner la mejor de mis caras.-

-Estoy buscando a María, ¿dónde está?.-

-Si lo supiera estaría con ella- Y no se lo diría además, no creo que sea bueno para María verle ahora- ¿Qué querías?.-

-Hablar sobre lo que me dijo el otro día, supongo que te lo ha contado, que no se quiere casar conmigo porque le gusta otro, pero quiero que entienda que no tiene otra opción y quiero intentar que estemos como antes, y a ti también te estaba buscando, ¿te has enterado ya lo del príncipe Antonio?- Fue explicando Gonzalo.-

-Si vas a decirle eso a María, mejor que no le digas nada, sabe que se tiene que casar contigo así que dale tiempo a que se acostumbre y se haga a la idea y, ¿qué es lo de Antonio?- Me asusté.-

-Mejor que te lo diga tu padre y le pones las pegas a él, gracias por todo- Dijo esto y se fue.-

 

Durante el resto del día me quedé pensando lo de aquel príncipe, ¿quién sería? Pensando y pensando me acordé, me lo dijo mi padre el día encerraron a Carlos y Dani. ¡No!, creo que en aquel momento decidí olvidar esas palabras de “Pues te adelanto que estamos acordando tu compromiso con el príncipe Antonio” que dijo mi padre aquel día, a eso se refería Gonzalo... ¡Pues no! No me va a pasar como María, no me voy a casar con alguien que ni conozco, esto ya lo hablaré con mi padre, ahora la importante es María. Pero no voy a separarme de Carlos, otra vez no, no puedo.

 

{...}

 

A la mañana siguiente nos despertaron temprano para prepararnos, al bajar estaba todo listo, ¡el salón estaba precioso! Los invitados estaban llegando, y nosotras estábamos casi listas.

 

{...}

 

Llegó el momento de empezar con la ceremonia.

Narrado por María

El día no fue muy especial, preparativos y gente.

 

{...}

 

Al día siguiente estaba todo precioso, la pena es que fuera a compartirlo con Gonzalo; todavía no sé como voy a ver a Dani y a Carlos, supongo que David nos lo dirá.

Me fui a una sala y empezaron a peinarme y vestirme. Cuando estuve lista la ceremonia comenzó.

Salí al salón y todo el mundo se me quedó mirando, que vergüenza. Y ahí estaba Gonzalo esperándome, fui caminando hacia él.

Llegué y todo el mundo se quedó mirándonos, ¡me quiero ir!

Comenzó, todo muy bonito pero llegó el momento que no quería que llegase, el “Sí quiero”. Digo que si... Digo que no... Digo puede. Estoy hecha un lío, bueno, hecha un lío no porque quiero a Dani.

-Gonzalo, ¿aceptas a María como esposa, para amarla, cuidarla y respetarla durante el resto de tu vida?- Dijo el cura.-

-Sí quiero- Dijo Gonzalo sonriendo.-

-Y tú María, ¿aceptas a Gonzalo como esposo, para cuidarle, amarle y respetarle durante el resto de tu vida?.-

Con dos simples palabras lo cambiaba todo, me gustaría desaparecer ahora mismo, no estar aquí, ser feliz por una vez.

Mi obligación es decir que sí, pero mi corazón me dice que diga que no, ¿a quién hago caso? En estos momentos me estreso mucho; María, es tu obligación, si estas con Dani y papá no lo permite a lo mejor le harán algo como encerrarle eternamente, así que la respuesta esta clara, me dije a mí misma. ¿Me traiciono? María, solo tienes una opción y es cumplir tu deber, y esa respuesta es el “Sí quiero” así que...

Capitulo 7


María y yo nos miramos asombradas y felices.

-Pero les sacaré siempre y cuando que cumplan mis condiciones.-

-¿Qué clase de condiciones padre?- Dijo María con un hilillo de voz.-

-Estarán libres siempre que no os volváis a ver, y para asegurarme de eso, habrá guardias en cada puerta del palacio, y si queréis salir a dar un paseo iréis acompañadas, no quiero correr riesgos, no son buena gente.-

Ahora SÍ  que estamos perdidas, ¿Y ahora qué? Tengo el corazón encogido de dolor, no puedo soportar esto.

Me levanté y me fui, estaba a punto de llorar y María me siguió.

Narrado por María

Salí detrás de Inés porque las dos estábamos mal. Llegamos a nuestra alcoba.

-Inés.-

-Dime- Me dijo casi llorando.-

-Tenemos que ser fuertes, los conseguiremos ver, no pierdas la esperanza- Intentaba no llorar pero no pude, ahora llorábamos las dos y nos abrazamos.-

-No puedo María, lo quiero demasiado para que me hagan esto.-

-¿Y si bajamos a decírselo y a verlos?.-

-Es peligroso, puede bajar papá en cualquier momento.-

-Me da igual- Me levanté y cogí las llaves- ¿Vienes?.-

-Sí, voy- Se levantó y nos fuimos camino a las prisiones.-

Esquivamos a los guardias con facilidad y llegamos a donde estaban los chicos, abrimos y me lancé a abrazar a Dani al igual que Inés a Carlos.

-Os va a liberar mi padre pero cumpliendo su condición que es no volver a vernos, habrá guardias en cada puerta y saldremos acompañadas- Le dije a Dani abrazándole lo más fuerte que podía y llorando.-

Dani me cogió de la barbilla y me levantó la cabeza de manera que nos mirábamos fijamente, vi sus ojos tristes y con preocupación.

-No te preocupes, nada nos separará, haré lo imposible por tenerte a mi lado- Se lo saltó una lágrima y me besó, un beso largo que demostraba todo el amor que había entre nosotros; fue precioso y quizás el último que nos diésemos.

No podíamos quedarnos más tiempo por si bajaban, así que nos despedimos y nos fuimos.

Narrado por Inés

Bajamos y allí estaban, no podía dejar de llorar así que fui corriendo a abrazar a Carlos y vio como estaba.

-Tranquila, respira y dime que te pasa- Me dijo Carlos con voz tranquilizante.-

Levanté la cabeza que estaba apoyada en su pecho para mirarle, pero nuestros ojos se encontraron y eso me hizo llorar más aún. Carlos me abrazó más fuerte.

-No puedo Carlos, no puedo- Dije como pude- Un puedo separarme de ti, no quiero separarme de ti.-

-¿Y quién te ha dicho que nos vamos a separar?- Preguntó Carlos confundido.-

-Mi padre, dice que os sacará siempre que no nos volvamos a ver, que pondrá guardias por todos lados y salir de palacio tiene que ser acompañadas, es imposible que nos volvamos a ver.-

-Inés, aunque tu padre haga todo eso, ¿crees que no voy a intentar estar contigo? Haré hasta lo imposible por tenerte.-

Esas palabras me tranquilizaron un poco, llegó el peor momento, la despedida.

Nos teníamos que ir por si a alguien se le ocurría bajar de un momento a otro, Carlos y yo nos fundimos en un beso, tal vez el más bonito en todo este tiempo; un beso largo y profundo, ni él ni yo nos queríamos separar.

-Inés nos tenemos que ir- Nos interrumpió María.-

Nos abrazamos y nos fuimos.

 

{...}

 

Fueron pasando los día, las semanas... Cada día era peor que el anterior, le echábamos mucho de menos; el tiempo fue pasando lentamente hasta que llegó el día anterior al compromiso de María, ¿podrían ir peor las cosas? No, ¿verdad?

Estaban por aquí muchos estilistas y diseñadores para realizar los trajes que llevaríamos. Pero María no levantaba cabeza.

Esa tarde estábamos en el jardín y se nos acerca una chica que no era Paula.

-Hola, ¿sois Inés y María?- Nos preguntó.-

-Sí, ¿por?- Preguntó María aún decaída, como para no estarlo.-

-Soy Jessica, la hermana de David, ¿lo conocéis no? Sí, bueno, vengo a deciros que me han contado vuestro problema y me han mandado venir, ya sabéis, David, Dani, Carlos y Paula; para deciros que ya que tú, María te comprometes mañana con Gonzalo, tu padre a contratado al grupo de mi hermano para venir, excepto a Carlos y Dani visto lo visto, y por eso vengo a avisaros que vamos a colar a los chicos para que podáis verles- Nos dijo Jessica muy animada, ¡qué maja es!.-

A María y a mi se nos abrieron los ojos como platos.

-¿¡En serio!?- Dijimos las dos sin creérnoslo.-

-Sí, igual mi hermano enamorado hace muchas locuras.-

-¿Enamorado? Jaja ¡qué gracioso! ¿De quién?- Preguntó María.-

-De Paula, no sé como ha sido, porque antes no se podían ni ver... Pero bueno, el amor es así. Bueno me tengo que ir, hasta mañana y estáis avisadas así que atentas- Tras decir eso se fue.-

María y yo nos abrazamos, no me creo que después de unas semanas sin saber nada de él lo vaya a ver mañana.

Narrado por María

Mañana me caso, me quiero morir, lo bueno es que voy a ver a Dani.

Está todo lleno de estilistas, decoradores, diseñadores...

-Buenos días señorita María, acabamos de terminar su traje, le rogamos que vaya a probárselo al taller- Era la modista, como no.-

-Enseguida estoy allí- Dije con pocas ganas.-

Puse cara de pereza, Inés empezó a reírse.

-Jaja, le rogamos que vaya a probárselo al taller- Repitió Inés con tono burlón.-

-Cállate que ya te tocará, la hermana tiene que ir bien vestida- Le saqué la lengua.-

-Espero que si tengo que pasar por lo que estás pasando ahora... Sea con Carlos- Dijo entristecida.-

-Será con él, no lo dudes, mi mala suerte no tiene por qué tocarte a ti, mírame, me voy a casar con un chico al que no quiero y al chico que amo no lo puedo ni ver.-

-Eso no es seguro hasta mañana, ¿crees que Dani va a permitir que te cases con Gonzalo? No, y lo sabes- Dijo segura de sí misma.-

Suspiré y me fui al taller, al llegar había un vestido precioso y según todos era “perfecto” para mi compromiso, ¡qué ilusión!

Me lo probé y me quedaba perfecto.

-Muchísimas gracias, es perfecto, me encanta- Dije emocionada.-

-No hay que darlas, es un vestido bonito para una chica bonita- Dijeron sonrientes las modistas.-

Me quité el vestido y salí corriendo hacia la habitación contentísima.

-¿Qué pasa?- Preguntó Inés asustada por mi comportamiento.-

-Me encanta el vestido, es perfecto- Contesté contentísima.-

-Ni que hubieses visto a Dani- Dijo riéndose.-

-Con eso no bromees, ya verás como mañana te quedas de piedra al verme.-

Apareció la modista llamando a Inés, entonces me reí yo, Inés me empujó y me caí a la cama, se rió y se fue.

Decidí ir a pensar, necesitaba estar un rato a solas sin nadie que me moleste, así que me fui al escondite.

Narrado por Inés

Ya casi es el día de la boda, fui a probarme el vestido y ¡me encanta! Al volver no estaba María, ¿dónde se habrá metido?

La busqué por todos lados y no aparecía.

Buscándola y buscándola me choqué

martes, 20 de agosto de 2013

Capítulo 6


Se oyeron pasos a lo lejos que se acercaban cada vez más, al llegar era David, ¡qué susto nos ha dado!

-¡Ey! ¿Cómo estáis? No podéis ir de malos por la vida- Bromeó David.-

Nos reímos.

David llamó a Paula para hablar.

Narrado por Paula

David me llamó, ¿qué querría? Por favor, a solas con él no, me pongo nerviosa y no sé que decir, sí, me gusta ¿vale?

-Lo primero, tranquila que van a salir de aquí, y lo segundo vamos a hablar con el rey a ver si le convencemos para que los saquen- Dijo David intentando calmarme.-

-¿Y por qué me lo dices a mi? ¿No sería más fácil decírselo a Inés y María?

-Sí, pero Carlos me ha contado todo lo que ha pasado y creo que es mejor mantenerlas al margen.-

-Sí, tienes razón- Dije de mal humor, y mira que lo siento pero no puedo evitarlo, todo esto me pone muy mal.-

-Eh, tranquila- Dijo David cogiéndome la cara- Todo va a salir bien, ¿vale?.-

Estuvimos un rato mirándonos a los ojos hasta que no aguanté más y le besé y él me siguió.

-¡¡¡David, suelta a mi hermanita o te las verás conmigo!!!- Gritó Carlos a lo lejos.-

-Tranquilo- Dijo David.-

Y volvimos con los demás.

Narrado por Inés

Mientras David y Paula se fueron a hablar.

-Le he dicho a Gonzalo que me gusta otro chico y no quiero casarme con él- Soltó María de repente.-

-¿¡Qué!?- Gritamos Dani y yo a la vez.-

-Sí, ya que tú Dani se lo has dicho a mi padre, ¿por qué yo no se lo digo a Gonzalo?.-

Sonrieron y se besaron, ¡qué bonito!

Carlos me cogió de la cintura y me dio un beso en la mejilla.

David y Paula terminaron de hablar y volvieron.

Narrado por María

Estábamos en las prisiones y tras contarle a Dani lo de Gonzalo me besó, jo, como lo quiero.

También ví como Carlos besó a Inés en la mejilla, ¿¡en la mejilla!? ¿¡Por qué no se besan ya y Carlos se le declara!? Voy a hablar con Carlo, le cogí del brazo y me lo llevé.

-¿A qué esperas?- Dije bastante seria porque no lo entendía.-

-¿A qué te refieres?- Dijo haciéndose el tonto.-

-Sabes perfectamente a lo que me refiero, que te declares a Inés antes de que la comprometan como a mí y sea demasiado tarde.-

-Es que eso es lo que me da miedo, que la comprometan y me deje de querer, porque me quiere, ¿no?, a lo mejor no, no se, la quiero muchísimo y no sé que hacer.-

-Carlos, ni te lo pienses, Inés está enamorada de ti y haría cualquier cosa por tenerte, solo que le cuesta mostrar lo que siente, así que da el primer paso y declárate, pídele la mano, lo que sea pero rápido. Y por mucho que la emparejen con otro, no lo querrá como te quiere a ti, así que déjate ya de niñerías.-

-¿Está enamorada? ¿En serio? Muchas gracias María- Me abrazó y fue a hablar a solas con Inés.-

Me acerqué a los chicos.

-Tenemos que pensar en como sacaros de aquí.-

Narrado por Inés

Estábamos todos allí intentando planear cómo sacar a Carlos y Dani de aquel lugar. David y Paula se cogieron de la mano y él le agarró de la cintura.

-¡¡¡David esas manos quietas!!!- Dijo Carlos haciéndose el “protector” con su hermana.-

-¿Qué pasa? ¿No puedo abrazar a mi novia?- Le enfrentó David.-

-¿Novia?- Se sorprendió Paula.-

-Sí- Respondió David tiernamente y le dio un dulce beso.-

-¡¡¡Ven aquí!!!- Dijo Carlos remangándose las mangas.-

David se alejó y Carlos fue a por él, estuvieron persiguiéndose y cuando estuvieron cara a cara.

-Con que el novio de mi hermanita...- Dijo Carlos con tono amenazante y se volvió a remangar- ¡¡¡Ven aquí y dame un abrazo!!! Creí que nunca os animaríais.-

Volvieron riéndose y David fue con Paula y Carlos conmigo y me besó otra vez en la mejilla, María le miró con mala cara y se lo llevó. ¿Estará celosa? Jeje ¿Celosa? María guapa, es mi chico no el tuyo así que vete con tu Dani.

Cuando volvieron y Carlos quería hablar conmigo a solas me temía lo peor, ¿qué querría? ¿Y si María está celosa y le ha pedido a Carlos que me deje, lo hará? Inés, calma que aún no te ha dicho nada.

-Bien, no sé como decirte esto- Dijo Carlos nervioso.-

Sí, tengo razón, va a dejarlo, María muérete.

-Nos conocemos desde hace poco y no quiero que te pase como a tu hermana, no quiero que te comprometas con un chico que no sea yo, así que- Se arrodilló- ¿Quieres casarte conmigo en un futuro?.-

Me he quedado de piedra, era eso, y yo temiéndome lo peor, no tengo remedio. Le levanté y le besé.

-Claro que quiero casarme contigo en un futuro, pero primero tenemos que resolver todo esto, pero la respuesta es un sí- Dije sonriendo y Carlos sonrió aliviado- ¿Qué pensabas? ¿Qué te iba a decir que no?- Carlos apartó la vista- ¿Lo pensabas? Jaja como se nota que no me conoces- Nos besamos y volvimos con los demás.-

Narrado por María

Carlos e Inés volvieron, ¿se lo habrá dicho?, miré a Carlos con un gesto de “qué ha pasado” y él sonrió así que...

-Carlos e Inés tienen algo que decir, ¿no?- Dije y observé como Inés se sonrojaba tras lo que había pasado.-

-Sí, Inés y yo somos novios y en cuanto podamos, en un futuro, nos casaremos- Dijo Carlos sonriendo y besó a Inés.-

Comencé a aplaudir y les abracé, estaba muy feliz por ellos.

-Enhorabuena Inés, me alegro muchísimo por ti.-

-Gracias María, ahora estoy muy feliz- Me sonrió Inés.-

-Te lo dije Carlos, te ama- Le dije con una enorme sonrisa.-

-Te estaré agradecido durante toda mi vida, te debo una enorme- Dijo con una sonrisa al igual que yo.-

Se me acercó alguien por detrás agarrándome de la cintura.

-Sácame de aquí, por favor; quiero estar contigo, lo necesito, te quiero- Dijo Dani susurrándome al oído.-

Me di la vuelta y lo tenía en frente.

-Lo haré, yo también te quiero, pero ¿qué podemos hacer para sacaros de aquí? Hay guardias por todos lados.-

-¿Y si probamos de noche? Ahora no, me refiero mañana- Dijo David.-

-Será peligroso pero podemos probar- Dije yo, pero el corazón se me paró porque tuve una sensación de poder estar con Dani, no María, no pienses eso.-

-Si lo hacemos cuando estén durmiendo no habrá problema, pero ¿aguantaréis hasta mañana?- Dijo Inés mirando a Carlos con una sonrisa.-

-Si hay alguna posibilidad de que os pillen no hagáis nada, no quiero que corráis ningún riesgo, quiero seguir viendo a María aunque sea aquí dentro- Dijo Dani abrazándome.-

-Dani tiene razón, Inés que no me fío mucho de ti, cuidado con lo que hacéis por favor y aguantaré si es por verte- Dijo Carlos a Inés, iban a besarse pero Inés le frenó.-

-¿Qué no te fías de mi? Yo también te quiero- Dijo haciéndose la ofendida.-

-Me refiero en esto tal y como están las cosas- Y se besaron.-

Planeamos todo lo de mañana pero David se dio cuenta de que Paula no estaba bien.

-¿Qué te pasa cielo?- Preguntó David preocupado.-

-Pues... No sé, tengo miedo de que esto no salga bien, que nos pillen y se acabe todo, de que si Carlos se queda aquí... Quedarme sola- Dijo Paula muy triste.-

-Paula- Dijo David levantándole la cabeza- Nunca vas a estar sola, ¿me oyes? Nunca, porque siempre me vas a tener a tu lado pase lo que pase, te quiero y no permitiré que estés mal- Y se besaron.-

Salimos y nos despedimos de David y Paula que se fueron. Mañana será un gran día.

Narrado por Inés

No pude pegar ojo en toda la noche, pero no se por qué en el fondo sentía una enorme tranquilidad, supongo que es por lo que Carlos me dijo.

Amaneció, nos levantamos y en el desayuno.

-Buenos días, han venido antes unos jóvenes, David y Paula, creo que son amiguitos de los chicos estos- Comenzó diciendo nuestro padre- Me han pedido si los puedo liberar, ¿no será cosa vuestra?.-

-¿Por qué iba a ser cosa nuestra, son la hermana y el amigo de ellos, que tenemos que ver nosotras- Respondí cabreada.-

-Tranquilízate Inés, que les voy a sacar.-

lunes, 19 de agosto de 2013

Capítulo 5


-¡Aaah!- Grité.-

-Ssh, no grites- Dijo Dani tapándome la boca.-

´¡Dani, qué susto! ¿Qué haces aquí?.-

-Voy a impedir todo eso del compromiso, me lo ha contado María y no lo permitiré, le prometí que estaríamos juntos y así será.-

-Dani, ¿tú estás loco?.-

En ese momento alguien más vino por detrás.

-¡Aaah!- Volví a gritar y era Carlos- De verdad, los dos queréis matarme de un susto.-

-¡No! Jaja he venido para detener a Dani- Dijo Carlos.-

-Sabéis que si os ven aquí estaréis en problemas, ¿no?- Dije.-

-Sí, pero no nos importa- Respondieron.-

Pasó mi padre a lo lejos y Dani le llamó, fue hacia él y comenzaron a hablar.

-Majestad, me he enterado lo del compromiso de María y no creo que sea buena idea- Dijo Dani seguro de sí mismo.-

María lo oyó, se acercó y le lanzó a Dani una mirada asesina.

-¿Y por qué dices eso, joven?- Preguntó mi padre perplejo.-

-Porque yo sé que María está enamorada de otra persona y esa otra persona esta enamorado de ella.-

-¿Y esa persona tiene nombre?.-

Dani iba a responder.

-No, no tiene nombre- Le interrumpí.-

-Inés, déjame decirlo por favor- Me pidió Dani- Esa persona soy yo, estoy enamorado de su hija y sé que ella de mi también, no puede impedir que estemos juntos, si ella es feliz.-

Mi padre se quedó asombrado, y antes de que pudiera hablar.

-Y yo se que a Inés le pasa lo mismo- Soltó Carlos así de la nada.-

Le miré con ganas de matarle y le dí un codazo.

-Inés, ¿tú también? Pues te adelanto que estamos acordando tu compromiso con el príncipe Antonio y vosotros dos, ¡guardias! Llevádselos.-

¿Qué? No por favor, ¿a dónde se los llevan? ¿Por qué?

-María no quiero verte más con ese chico ni a ti tampoco Inés, por vuestro bien- Y se marchó.-

No me lo puedo creer, les avisé que era mala idea, ¿y ahora qué? Lo primero es averiguar a dónde se los han llevado...

Narrado por María

No podía creer que Dani se lo hubiese dicho a mi padre, su reacción fue la peor, tenía ganas de llorar pero no podía ya que tenía delante a Gonzalo, Inés se había ido, ¿cómo se atreve a dejarme a solas con él otra vez?

-¿Qué te pasa?- Me preguntó.-

-Nada, estoy bien- Le sonreí falsamente.-

¿Bien? Nos comprometen sin tener en cuenta nuestra opinión ni nuestros sentimientos, al chico que quiero se lo acaban de llevar y, ¿yo digo bien?

-Si hay algo que pueda hacer por ti dímelo.-

Cuando me dijo eso se me ocurrió una idea, ¿y si le digo que no me quiero comprometer con él porque estoy enamorada de otro? Dani se ha arriesgado, ¿por qué yo no?

-Pues mira, al final si me puedes ayudar en algo, sabes que nos vamos a comprometer dentro de poco y la verdad es que yo estoy enamorada de otro y ese chico está enamorado de mi, pero mi padre no lo permite, si tu dijeras que no quieres casarte conmigo a lo mejor cambian de opinión- Dije, en ese momento apareció Inés, menos mal porque después de decírselo Gonzalo se quedó con una cara....-

-Hola Inés- Le saludé.-

Al ver a Inés me vino a la mente de que Carlos está enamorado de ella y ella está enamorada de él, y tengo que hacer que empiecen a salir antes de que a Inés la comprometan y sea tarde.

Narrado por Inés

Les avisé, no, esto ya no, ¿y ahora qué hago sin Carlos? Me fui con mi padre a ver si conseguía hacerle cambiar de opinión pero no dio resultado y siguió hablando con los padres de Gonzalo.

Me acerqué a María que estaba con su “novio” y él tenía cara rara.

 

{...}

 

La noche por suerte pasó rápido, ya era casi de noche y Gonzalo y sus padre se habían ido.

Salí a tomar un poco el aire y se me acercó una chica que no había visto nunca.

-Hola- Me dijo con tono de preocupación.-

-Hola- Respondí extrañada.-

-¿Eres Inés o María?.-

-Inés, ¿por qué?- Esto ya es raro.-

-¡Por fin te conozco! Carlos no para de hablar de ti, le tienes loco. Por cierto, soy Paula, su hermana, y he venido porque nos ha llegado una carta de aquí diciendo que Carlos y Dani están presos.-

¿QUÉ? ¿PRESOS? ¿Por decir sólo lo que piensan? Esta vez mi padre se ha pasado bastante. En ese instante llegó María.

-Hola Inés, hola....-

-Paula- Respondió.-

-Hola Paula- Dijo María, vio que yo tenía cara rara- Inés, ¿qué te pasa?.-

-Esta es Paula, la hermana de Carlos, y me han dicho que han llevado a Carlos y Dani presos, padre se ha pasado y esto no va a quedar así- Iba a irme pero María me detiene- ¿Qué haces?.-

-Lo primero es que ya que sabemos donde están vamos a ir a verles.-

Y así hicimos, bajamos a las prisiones y allí estaban los dos, como teníamos las llaves de todo el palacio, incluso las de esta sala, les abrimos la puerta y Paula fue corriendo a abrazar a Carlos.

-¿Qué hacéis aquí?- Preguntó Dani.-

-Intentar sacaros de aquí- Dijo María abrazándole.-

Se oyeron pasos a lo lejos que se acercaban cada vez mas

sábado, 17 de agosto de 2013

Capítulo 4


-¿Qué es eso de que has besado a un tal Dani y vas a dejar a Gonzalo?- Dijo la persona antes de aparecer por la puerta, cuando entró, ¡oh, no!.-

-Em... Nada padre- Dije intentando salvar a María que estaba asustada.-

Pff... Nuestro padre nos ha pillado, ahora sí que se ha liado...

-Cállate Inés, contesta a mi pregunta María- Nos dijo enfadándose.-

-Padre yo...- Intentó decir como pudo.-

Yo observaba sin decir nada, creo que es lo único que puedo hacer.

-Tú nada, te aviso, como me entere de que cortas con Gonzalo las cosas se pondrán muy feas, sus padres y yo estamos arreglando ya las fechas para el compromiso y te advierto que será por una fecha cercana, así que déjate al Dani ese... ¿No será el que canta?- Dijo ya a punto de darle algo del enojo que tenía.-

María al oír lo del compromiso es como que desconectó, le cambió la cara por completo, se había quedado petrificada con la noticia y era como que no escuchaba nada más; le había afectado bastante, así que me entrometí.

-Que va padre, ¿cómo va a ser el que canta? Estuvimos hablando casi toda la tarde, y si hace falta yo... Yo ayudaré a María a prepararse para el compromiso que, ¿cuándo será?- Dije inventándome una historia pero quedó más o menos creíble.-

-Será en tres semanas, ahora a dormir, que descanséis- Nos dio un beso a cada una y se fue.-

María seguía helada, al decirle eso es como si le hubiesen quitado las ganas de hacer cualquier cosa, me mataba verla así.

-María, despierta.-

-¿Ha dicho compromiso? ¿Compromiso? ¿Con Gonzalo? No puedo, después de todo esto no puedo, supongo que se puede aplazar o suspender o puedo evitar que se prepare- Dijo María con esperanza de encontrar una solución.-

Le negué tristemente con la cabeza.

-Por desgracia ya es tarde, os comprometéis en tres semanas,.-

-¿¡Qué!? No, no por favor Inés no puedo- Dijo María soltando algunas lágrimas.-

Se tumbó en la cama y comenzó a llorar, esto le afectaba bastante, no sé como vamos a salir de esta.

Decidí enviarle una carta a Dani para que hablara con María, esto no podía seguir así.

Bueno, ha sido un día muy largo así que me voy a dormir.

Narrado por María

Nos fuimos a nuestra habitación a hablar, le conté a Inés todo lo que había pasado con Dani y justo lo escuchó mi padre, me quedé de piedra con lo que dijo, ¿cómo que compromiso? Yo no sentía lo mismo por Gonzalo, no podía comprometerme, era una injusticia. Empecé a llorar sin parar, llorando y llorando me quedé dormida.

Al día siguiente, al despertarme, no tenía fuerzas para nada, pero si no bajaba se enfadarían, mi padre no puede notar que estoy mal; cogí el primer traje que ví, me lo puse y bajé.

Estaban desayunando.

-Buenos días- Dije intentando disimular.-

-Buenos días- Me respondieron.-

Noté que Inés me estaba haciendo señas para que me diese prisa y así hice. Terminé de desayunar y nos fuimos.

-Dime Inés.-

-Le he mandado una carta a Dani diciéndole que teníais que quedar hoy, dentro de una hora, en el bosque de aquí al lado.-

-¿¡Que has hecho qué!?.-

-María, es por tu bien, necesitáis hablar.-

Fuimos al jardín a dar un paseo y se acercó el consejero real.

-Majestades, fuera hay un plebeyo llamada Carlos que pregunta por usted señorita Inés, ¿le digo que entre?- Nos dijo.-

Inés se quedó paralizada y contesté yo.

-Claro, que pase.-

El consejero fue a buscarle.

-Bueno, si he quedado con Dani voy a prepararme, tú cúbreme.-

Subí a mi habitación, me cambié y salí camino al bosque. Pasaron quince minutos andando y por fin llegué, y ahí estaba Dani, esperándome.

-Tenemos que hablar sobre lo de ayer- Soltó él de golpe.-

-Buenos días lo primero, y sí, tenemos que hablar.-

-Buenos días, estoy nervioso porque Inés me dijo que tienes que contarme una cosa, pero quiero empezar yo pidiéndote perdón por el beso de ayer, tienes novio y no debería haberme entrometido, pero no pude evitarlo.-

-En realidad, no tienes que pedir perdón, el beso me gustó porque lo que siento por ti cada vez va a más, pero eso ya está olvidado; ahora te tengo que decir algo más importante.-

Le conté todo lo que pasó anoche, me puse triste y volví a llorar, esto me superaba.

Dani se acercó y me dio un abrazo haciéndome sentir a salvo, lo quería, y mucho.

-Tendríamos que haber pensado eso antes, soy un simple plebeyo, y no estoy al alcance de una bella dama como tú, pero si de verdad me quieres, nadie nos va a impedir estar juntos, pero necesito saber si me quieres.-

-Te quiero- No lo dudé un segundo, lo quería, lo tenía claro.-

Se acercó y nos volvimos a besar, pero esta vez en el beso había amor, esperanza de seguir juntos.

Nos separamos rápidamente ya que oímos unos ruidos a lo lejos.

Narrado por Inés

María se fue, supongo que ha prepararse. Vino Carlos, ¡qué guapo! Este chico, sin duda me vuelve loca.

-Hola- Me dijo sonriente.-

Miré a mi alrededor y ví a mi padre a lo lejos, por precaución no me puede ver con Carlos, así que le cogí del brazo y nos fuimos a un escondite que solo sabíamos María y yo.

-¿Qué pasa?- Me preguntó.-

-Nada, nada, ¿qué querías?.-

-He visto la carta que le enviaste a Dani, ¿qué ha pasado?.-

-Pues María se compromete con Gonzalo en tres semanas, nada interesante, más bien... Injusto-

-¿¡En serio!?.-

-Sí, y mira que le dije a María que se olvidase de Dani, pero no me hace caso, es que es imposible estar con alguien que no tiene “título” como dice mi padre.-

-¿De verdad crees que es imposible? ¿Nunca has pensado en intentarlo por si las cosas cambian?- Me soltó de repente, ¿a qué se refería?.-

Iba a hablarle, pero me calló la boca con un dulce beso. Ya sé a qué se refería con lo de intentarlo, ¡NO! ¡Esto no puede ser! Pero por mucho que me repita esto una cosa la tengo clara, cada minuto que pasa Carlos me gusta más.

Nos quedamos mirándonos, bajé de mirarle sus preciosos ojos a sus dulces labios, ví como se los mordía, no aguanté más y le besé.

-Te quiero- Me dijo.-

¿Me quiere? No me lo creo. Ahora solamente hay que esperar que no nos descubran.

-Yo también te quiero, pero ten en cuenta que lo nuestro no puede ser, igual que María se compromete ahora ten en cuenta que la siguiente quiera o no quiera soy yo.-

-Lo sé, y no me importa, haré lo imposible por tenerte a mi lado.-

-¡Inés!- Oímos como alguien me llamaba.-

-Carlos tú quédate aquí, ahora volveré para que puedas irte sin problemas, ¿vale?.-

-Vale.-

Me dí media vuelta para irme pero Carlos me agarró del brazo y me besó.

-¡Inés!- Me volvió a llamar.-

Le sonreí a Carlos y me fui, el que me llamaba era mi padre.

-Dime.-

Me acerqué a él.

-¿Dónde está tu hermana?.-

-Estaba cansada y fue a la habitación, ¿por qué?.-

-Esta noche vienen los padres de Gonzalo con Gonzalo a cenar para aclarar unas cosas del compromiso y quiero que esté lista porque llegarán en dos horas.-

Como si no tuviéramos ya bastante... No se como se tomará esto cuando se entere.

En ese momento apareció un guardia del ejército de mi padre.

-Mi señor, ¿usted no buscaba a su hija?- Preguntó.-

-Sí, pero ya Inés me ha dicho que está en su alcoba.-

-Me temo que se equivoca, hace poco la vieron salir camino al bosque.-

¡No! ¡La han visto! ¿Y ahora qué hago?

-N... No puede ser, seguro que es otra persona.-

Mi padre me miró enfadado y se fue a buscarla.

Genial, por lo menos espero que no les encuentren.

Narrado por María

Eran dos hombres del ejército de mi padre, ¡oh, no! ¿Por qué me pasa todo a mi? Dani tenía que irse.

-Dani, escóndete, es el ejército de mi padre, me castigarán sin salir de palacio si me ven contigo y a ti te pueden hacer la vida imposible, me tengo que ir y pase lo que pase no olvides que te quiero.-

-Cuídate, te escribiré, haré lo posible porque estemos juntos no te preocupes, yo también te quiero- Me dio un beso intenso en el que se demostraba que él me quería y yo le quería y fue adentrándose al bosque.-

Yo me fui camino hacia los caballeros de mi padre cogiendo algunas flores que había para poner la escusa de que las estaba recogiendo. Llegaron hasta mí.

-Señorita, su padre desea hablar con usted y me ordenó salir a buscarla- Me dieron mi caballo para que me subiera y fuimos camino a palacio.-

Al llegar mi padre me estaba esperando muy impaciente y me quedé de piedra con lo que me dijo, ¿por qué me pasa todo esto? ¿Por qué no puedo estar con el hombre al que quiero? Pero Dani me dijo que haría lo posible por estar conmigo, así que aguantaré por él. Tenía que preparar todo para esta noche, observé como Inés me llamaba así que me acerque.

-¿Si te digo una cosa te enfadas?- Me preguntó con voz inocente.-

-¿Qué has hecho?.-

-¿Yo? Nada, solo que tenemos a Carlos en nuestro escondite y ¿qué ha pasado con Dani?.-

-Jaja, mientras no lo pillen estará a salvo, pero vamos a buscarle que no podrá quedarse ahí mucho tiempo.-

Nos dirigimos al escondite y allí estaba él.

Narrado por Inés

-¿Y bien?- Le preguntó Carlos a María.-

-Pues... Digamos que Dani y yo hemos comenzado a salir- Dijo emocionada.-

-¿Qué? ¿Y ahora me entero? ¿Qué clase de comunicación entre hermanas es esta?- Dije haciéndome la ofendida.-

Se rieron. Los tres salimos del escondite, nos despedimos de Carlos y estábamos dispuestas a dar un paseo cuando se nos acerca un guardia.

-Por órdenes de vuestro padre que subáis a arreglaros, los invitados ya están aquí- Y se fue.-

Así hicimos, fuimos a la habitación, nos pusimos los primeros trajes que vimos, bajamos y allí estaban los tres; Gonzalo, su madre y su padre.

Les saludé y se marcharon dejándonos a María y a mí con Gonzalo. María y yo no parábamos de lanzarnos miradas, Gonzalo me hizo un gesto para que les dejara solos, y después de pensármelo varias veces lo hice, después de todo no tenía otra opción.

Salí a la terraza un rato y alguien me sorprendió por detrás.

viernes, 16 de agosto de 2013

Capítulo 3


-¡Carlos!- Le llamó Blas- ¡Ven, corre!.-

Nos separamos enseguida, me guiñó un ojo y se fue, no me puedo creer lo que ha pasado, bueno, lo que casi pasa.

Narrado por María

Seguía en la terraza con Dani a solas, me lo estaba pasando genial, este chico es supersimpático. Se me escapó un pequeña sonrisa pensando en esto y desgraciadamente él la vió.

-¿De qué te ríes?- Me preguntó riendo.-

Tenía que inventarme una escusa para volver, me encontraba mejor que antes.

-Jaja, De nada, me vuelvo a la fiesta, ¿vienes?- Sonreí.-

Para mi sorpresa la respuesta no fue la esperada

-No, me quedo aquí, ahora después iré- Creo que se había dado cuenta de que no le he dicho la verdad.-

-Esta bien, si quieres algo avisa- Me fui para a dentro.-

No sabía muy bien qué hacer ahora, ¿dónde se ha metido Inés?, estaban Álvaro y David a lo lejos así que decidí acercarme.

-Hola, ¿cómo va todo?- Les dije.-

-Muy bien- Contestó Álvaro.-

-Y, ¿sabéis dónde están los demás e Inés?.-

-Dani salió a la terraza, me parece que Inés se fue al jardín y Carlos al rato también se fue, y Blas se habrá perdido, conociéndole- Me dijo David divertido.-

-Vale, gracias.-

Mi padre me estaba llamando así que me acerqué

-María, ¿y tu hermana?, es hora de partir la tarta.-

-Creo que está en el jardín.-

-Ve a buscarla y dile que venga.-

-Vale padre.-

Me fui camino al jardín y cuando llegué me encontré a Inés y a Carlos muy pegados, no me lo podía creer, ¡se iban a besar!, pero de repente apareció Blas llamando a Carlos y se fue, entonces me acerqué corriendo a Inés para decirle que debíamos ir dentro.

-Inés, es la hora de la tarta, hay que entrar, y no te libras de contarme todo esto- Le dije guiñándole un ojo.-

Narrado por Inés

Carlos se marchó y apareció María de la nada.

-Inés, es la hora de la tarta, hay que entrar, y no te libras de contarme todo esto.-

-Vale, vamos para dentro, pero tú y yo tenemos que hablar seriamente antes de que yo te cuente nada- Le dije seria.-

Entramos y todo el mundo puso la vista en nosotras para vernos partir la tarta.

Tras hacerlo todos continuaron con la fiesta y yo me llevé a María, necesitaba estar a solas con ella. La llevé a nuestra habitación, me senté en la cama y comencé a decirle:

-María, seriamente, ¿qué hay entre tú y Dani?.-

-Nada, bueno... No se, ¿qué crees?- Me dijo confusa.-

-Creo que te gusta Dani más de lo que tú piensas y que lo niegas porque sabes que es tu deber estar con Gonzalo, pero ya no sientes lo mismo que antes por él- Le dije muy convencida.-

-Ni yo lo hubiese dicho mejor... Supongo que tienes razón, ¿qué puedo hacer?.-

-Pues... Como suelen decir haz caso a tu corazón, aunque lo tuyo con Dani sea imposible. También te en cuenta que en esto del amor nuestra opinión porque lo único que quieren es casar a sus hijos para ampliar el reino, a ti te emparejaron con Gonzalo queráis o no queráis, y si como dices ahora te gusta Dani no creo que lo vayan a permitir... Y tú sabes muy bien el por qué.-

-Lo sé, y por eso intentaré no enamorarme de el, de sus ojazos azules, de su increíble sonrisa....-

-¡María!- La corté.-

-Me costará, y mucho- Dijo con tono entristecido.-

Terminamos de hablar y nos dirigimos hacia el salón principal donde estaba la fiesta.

Narrado por María

Entramos después de la charla que había tenido con Inés, intentaba sacar una sonrisa algo creíble.

Como ya estaba acabando fui a aprovechar el poco tiempo que quedaba para bailar, de repente veo a Dani que se acerca por un lado y a Gonzalo viniendo por otro, Gonzalo llegó primero.

-¿Me concedes este baile?- Me tendió su mano y se la acepte, era mi novio, ¿qué podía hacer?.-

Miré a Dani de reojo y estaba triste, me mataba verlo así, ¿qué le pasaría?

Gonzalo me cogió y nos dirigimos a la pista de baile, ya no veía a Dani, se había ido.

-Muchas felicidades princesa, siento no habértelo dicho antes.-

-Gracias, no tiene importancia, ¿dónde estabas?.-

-Pues la verdad, estaba comprándote esto­- Sacó del bolsillo un estuche y me lo dio, lo abrí y en el interior había un precioso collar de plata con diamantes incrustados con los nombres de Gonzalo y María grabados, me quedé sin habla- ¿Te gusta?.-

-Me encanta, pero no tenias por qué comprarme nada, con que estés tú me basta- ¿He dicho yo eso?

Gonzalo sonrió y me dio un tierno beso. Cuando nos separamos lo primero que ví fue a Dani al fondo mirándonos con una mirada asesina, ¿qué le habré hecho?, que yo sepa nada.

Gonzalo se despidió porque tenía que irse, cuando se marchó me fui con Inés y los chicos. Estaban todos, incluido Dani que seguía fulminándome con la mirada.

Me cansé, le cogí del brazo y me lo llevé, no soportaba que me mirase así. Fuimos a la terraza en la que estábamos antes y comencé:

-¿Tienes algún problema conmigo?- Dije furiosa.-

-No, solo estoy mal, pero no tienes la culpa de nada- Me contestó, entonces ¿por qué me mira así?.-

-¿Y por qué me miras así?.-

-Eres la razón por la que estoy triste, pero no es tu culpa- ¿¡CÓMO!? ¿Triste por mi?.-

-¿Por qué?- No entendía a este chico.-

-Porque me has hecho creer que sentías algo por mi y te he visto besándose con otro, pero no es tu culpa porque soy yo el que se ha hecho ilusiones. Así que te dejaré con tu novio en paz- Cuando me dijo eso no pude evitar soltar una lágrima- ¿Estás bien?- No le contesté, creo que era hora de decirle toda la verdad.-

-No Dani, no estoy bien, cuando te conocí digamos que las cosas en mi cabeza se empezaron a liar sobra lo que sentía, sí, siento algo por ti, y por Gonzalo... Ya no siento lo mismo- No tenía fuerzas y comencé a llorar, estaba confusa.-

Me dirigí hacia la barandilla, no podía mirarle. Se acercó a mi y me agarró de la cintura pegándose a mi.

-No llores por favor, siento todo esto, te quiero- Me dijo dulcemente al oído.-

Me giré para mirarle y me quedé frente a él.

-Lo mejor que me podría haber pasado es conocerte, pero necesito tiempo para pensar, puede que termine mi relación con Gonzalo aunque sé que aunque lo haga lo nuestro será imposible- No aguanto más todo esto, estaba fatal.-

Decidí dejar de hablar, porque este es un tema que de verdad me pone mal, entonces sucedió algo que no me esperaba, Dani me besó, un beso corto pero intenso.

Le miré y sin creer lo que acaba de ocurrir me volví para a dentro, él me siguió y volvimos con los demás y desde ahí no volvimos a mirarnos.

Narrado por Inés

Llegamos junto al resto y quisimos unirnos a bailar, Gonzalo le pidió un baile a María, y yo... Me voy, porque yo con los bailes... No es que se me den muy bien.

Me fui con los chicos y Dani tenía mala cara.

-Dani, ¿qué te pasa?- No respondió, ví como le lanzaba una mirada fulminante a Gonzalo y María y me supuse lo que le pasaba.-

El baile terminó y todos empezaron a irse a casa, nos despedimos de casi todos y ya estábamos solas, bueno, con Blas, Álvaro, Carlos, David y Dani que no sé qué seguían haciendo aquí; pero me da igual, siempre y cuando Carlos no se vaya... Inés despierta de una vez.

Dani y María no paraban de lanzarse miradas, así que María cogió a Dani del brazo y se lo llevó, ¿qué iba a decirle?

 

{...}

 

Volvieron, hablaron con nuestro padre y se marcharon.

Era tarde, estábamos cansadas y decidimos irnos a nuestra alcoba. Allí nos sentamos las dos en nuestra cama, necesitábamos aclarar esto, ¿cómo se han podido liar tanto las cosas en una tarde? Notaba que María tenía cara de sentirse culpable.

-¿Qué te pasa?- Le pregunté.-

Se lo pensó dos veces antes de responder pero al final soltó.

-He besado a Dani.-

-¿¡QUÉ!? Cuenta.-

-Pues eso, cuando nos hemos ido a hablar, al final... Pasó....-

-Y que se supone que vas a hacer ahora.-

Se encogió de hombros. Bueno, veremos lo que vamos a hacer, por ahora las cosas no están nada claras.

-Creo que voy a dejarlo con Gonzalo, sé que si sigo con él me estaré engañando a mí misma- Dijo María.-

En ese momento oímos unos pasos que se acercaban hacia la puerta.

-¿Qué es eso de que has besado a un tal Dani y vas a dejar a Gonzalo?- Dijo la persona antes de aparecer por la puerta, cuando entró, ¡oh, no!.-