No María,
esto es para toda la vida, no puedes estar con Gonzalo queriendo a Dani.
Se oyó una
voz al fondo.
-¡¡¡Pues
claro que no quiere casarse con Gonzalo!!!- Gritó la extraña voz.-
Pensé que
era Dani, pero no, era Inés, ¿qué está haciendo?
-Inés
siéntate y cállate- Le ordenó mi padre.-
-No, María
no puede...- En ese momento me acerqué y le tapé la boca.-
-Voy a
hablar con ella y hacerle razonar, de paso voy al aseo que con los nervios...-
Dije para salir de ahí.-
Fuimos
hacia el jardín.
Narrado por
Inés
No podía
estar callada, no puedo ver a María sufrir de esta forma. No aguanté y me
entrometí, María y yo nos fuimos a hablar al jardín.
-¿Qué? Al
menos podrías dar las gracias, tú no quieres casarte con él- Dije indignada.-
María iba a
hablar, pero la callé porque había oído unos ruidos, ¿de dónde venían?
Fuimos
caminando lentamente y los ruidos venían de nuestro escondite, ¿quién puede
ser?
-Inés, el
ruido viene del escondite, ¿Quién es?- Dijo María asustada.-
-Pues no lo
sé, se supone que ese lugar solo lo conocemos tú, yo y... ¡Carlos!- Dije
emocionada.-
-Pues
vamos.-
Fuimos
corriendo hacia allí y estaban los dos, Dani y Carlos, después de tanto tiempo
sin verles no me lo creo.
-Por fin
aparecéis, creíamos que nos quedaríamos esperándoos todo el día aquí- Dijo
Dani.-
-Eso jaja,
¿qué tal ha ido todo? Por cierto Inés, estás preciosa- Dijo Carlos.-
-¿Ido de
qué? Me he encargado de que María no diga el “Sí quiero”; de nada y gracias
Carlos, tu también- Le abracé, necesitaba sentirlo cerca.-
-Bueno,
pero tenemos que volver dentro y ¿Qué diré?- Preguntó María abrazando a Dani.-
-Di que sí
y ya está, no quiero que tengas más problemas- Dijo Dani y todos le pegamos en
el brazo- Vale, vale, lo capto.-
-¿Y si no
tiene que decir nada?- Dijo Carlos con cara de haber tenido una idea.-
-¿Qué
quieres decir?- Pregunté confundida.-
-Quiero
decir que nos vayamos lejos de aquí, donde nadie nos impida estar juntos.-
¿Irnos? Sí,
es buena idea, pero sería dejarlo todo atrás. Pero quiero estar junto a él, lo
tengo claro.
Narrado por
María
Menos mal
que los ruidos eran Dani y Carlos.
Fue
increíble la alegría que sentí al verle de nuevo y abrazarle con todas mis
fuerzas, no quería decirle que sí a Carlos, pero era mi deber hasta que a
Carlos se le ocurrió la idea de fugarnos, no me parecía buena idea, me
separaría de mi padre, de mi casa y pondría en peligro a todos por haberme
enamorado de Dani y tener que comprometerme, todo es culpa mía... Me siento
fatal. A Inés le parecía buena idea, se le notaba en la cara pero también
estaba preocupada y no muy convencida.
-No creo
que sea muy buena idea, iros vosotros y yo os cubro ya que todo esto es por mi
culpa, no quiero poneros en peligro- Dije indecisa.-
-A mi me
gusta la idea, pero es difícil- Dijo Inés.-
-Nada es
por tu culpa, tú no tienes la culpa de enamorarte y que te obliguen a casarte
con el hombre que no quieres, no es ponernos o ponerme en peligro, es hacerme
feliz, necesito tenerte a mi lado María, estas semanas sin ti han sido
durísimas, te quiero por favor vente- Dijo Dani acercándose a mi y me besó
dulcemente.-
-Como le
voy a decir que no a alguien como tú, claro que iré- Dije sonriente.-
-Entonces
todo arreglado, podemos estar juntos sin que nadie nos moleste- Dijo Carlos
acercándose a Inés para besarle.-
Se oyeron
unos pasos y salimos a ver quien era, menos mal que eran David y Paula que
venían de la mano y Jessica al lado.
-Hola
chicos- Dije sonriente.-
-Hola,
chicas os están buscando y quieres que vayáis dentro- Dijo David.-
-Pues no
nos van a encontrar, hemos pensado en fugarnos ahora mismo para poder estar
juntos sin que nadie nos moleste- Dijo Dani muy feliz, lo quiero.-
-¿Nos
podéis cubrir?- Preguntó Carlos.-
-Claro que
os cubrimos, pero ¿estáis seguros? ¿Y si os pillan? Tened cuidado- Dijo Paula y
fue a abrazar a Carlos.-
-Carlos no
te digo nada...- Dijo David celoso.-
-David,
sabes que son hermanos, ¿no?- Dijo Jessica riendo.-
-Pues claro
que lo sé.-
-No os
preocupéis, tendremos cuidado y si nos pillan asumiremos las consecuencias-
Dije.-
Nos
despedimos y ya teníamos pensado como íbamos a salir para que no nos vieran,
estaba un poco asustada y no es para menos, no podía evitarlo.
Narrado por
Inés
Ya lo
teníamos todo listo, ¿en serio nos íbamos a fugar? No me lo creo aún ni yo, por
una parte quiero ya que estoy con Carlos sin tener que escondernos, bueno, eso
de sin escondernos hay que verlo porque huir es esconderse; por otra parte no
quiero, porque es dejar toda una vida atrás, ¿estaré preparada? No lo sé, pero
si no lo intento nunca lo sabré.
Jessica,
David y Paula nos podrían cubrir mientras nos vamos, pero ¿cuándo vean que no
estamos? ¿Qué dirán? ¿Qué estamos muertas? Bueno ya pensaremos en eso cuando se
nos presente.
David nos dio
la señal de que podemos salir ya y así hicimos, una vez fuera cogimos nuestros
caballos y nos fuimos.
{...}
Han pasado
ya dos días desde que nos fuimos, vivíamos en una preciosa cabaña apartada un
poco de la población, no me separaba de Carlos ni un minuto, aparte de que él
no me dejaba y María con Dani igual. Ese día vino Paula con David y Jessica
para hacernos una visita.
-Hola
fugitivos- Bromeó David.-
-De
fugitivos nada- Se quejó Dani- Sólo ser felices.-
-Lo que tú
digas, pero todo el pueblo está buscando a Inés y María sin descanso- Dijo
Paula.-
Bien, vamos
bien, todo el pueblo buscándonos.
-No nos
encontrarán mientras no salgamos de aquí- Dijo María segura.-
-¿Nos
podemos quedar? Esta noche digo- Preguntó Jessica.-
-Sí, claro.
Y David mucho ojo lo que haces por la noche con mi hermana- Dijo Carlos.-
-¿Yo? ¿Qué voy
a hacer? No digas tonterías Carlos- Intentó salvarse David.-
Todos nos reímos.
Se hizo de noche
y nos fuimos a dormir, a la mañana siguiente Carlos, David y Dani no estaban, ¿Dónde
podrían estar? Les buscamos por toda la casa y nada, no aparecían.
De repente se
abre la puerta de golpe y era David, venia corriendo.
-Chi... Chicas
dijo como pudo cogiendo aire.-
-David, respira
y dinos que pasa- Dijo Jessica.-
-Estábamos...
En el pueblo para... Para comprar cosas y... Y nos ve el ejército de vuestro padre...-
Nos contó David como pudo.-
-¿Y qué?- Preguntó
María nerviosa.-
-Y salieron
corriendo persiguiendo a Dani y a Carlos, les atraparon porque todos piensan que
tienen algo que ver con vuestra desaparición- Terminó de contar David.-
Tras decirnos
eso no sabíamos qué hacer, ¿qué les habrán hecho? Hay que volver ya, cogimos el
caballo y volvimos a palacio.