domingo, 29 de septiembre de 2013

Capítulo 17



Narrado por Inés

María se fue, ¿y ahora qué? Dani estaba llorando en el suelo, estaba destrozado. Me senté a su lado y le acaricié la mejilla limpiándole algunas lágrimas.

-Dani, vamos a ir a por ella, no te preocupes.-

-Eso espero, pero es que ¡África no es mi novia joder! Ahora se ha ido y no he podido decírselo.-

-¿No? ¿Y entonces?- Estaba confusa.-

-África es mi hermana, nadie puede vernos juntos ni saber que nos conocemos porque hace unos años cometimos un delito para ayudar a nuestros padres y tuvimos que huir para que no nos encontraran, por eso vinimos aquí y nos separamos, al parecer a mi me dieron por muerto y solo la buscan a ella y...- Estalló en lágrimas.-

-Dani tranquilo- Le abracé- María va a saber esto y estaréis juntos otra vez, no te preocupes- Le di un beso en la mejilla.-

-Ejem... Cortarse un poco que estoy delante- Bromeó Carlos.-

Nos levantamos.

-Ahora solo hay que buscar algún barco que nos lleve.-

-¡Dani!- Era esa chica, África.-

-¿Qué haces aquí? ¿Qué pasa?.-

-¿Lo has arreglado ya con tu novia?.-

-No, voy a buscarla.-

-Voy contigo.-

-Ni se te ocurra, tú te quedas aquí.-

-Dani, quiero ir, al menos si no te deja hablar a ti, hablo yo- Dijo decidida y Dani resopló.-

-Está bien, vamos- Se dirigió a Carlos y a mi- Chicos, esta es África, mi hermana; África, ella es Inés y él es Carlos, su novio- Nos presentó Dani.-

-Encantada- Dijo África sonriente.-

Le sonreí, pero delante de mí vi a Antonio que estaba en un barco así que fui corriendo y Carlos me miró con mala cara.

-¡¡¡Antonio espera!!!- Grité antes de que zarpara.-

Antonio bajó del barco.

-Dime preciosa- Dijo sonriente, Dios no, esa sonrisa no.-

-¿Vas hacia el reino?.-

-Sí, tu padre quiere verme.-

-Genial, voy contigo.-

-Está bien, sube.-

-Y... Unos amigos también vienen.-

-¿Qué amigos?- Señalé a Carlos, Dani y África y Antonio pone cara de celoso- Está bien, pero ya.-

Les hice una señal para que vinieran. Nos montamos en el barco y pusimos rumbo a palacio.

 

{...}

 

Al llegar.

-Gracias Antonio- Le abracé.-

-No hay de qué, todo lo que necesites dímelo, aunque dentro de poco estaré a tu lado ¿no?- ¿Se refería a la boda? Aún no le dije a Antonio que estaba con Carlos, muy mal Inés, muy mal- Bueno ya nos veremos- Me besó en la mejilla muy cerca de la boca provocando que la piel se me erizara.-

-Adiós.-

Se marchó, ahora hay que buscar a María. Fui con los demás y Carlos no paraba de mirar alejarse a Antonio con odio.

-¿Vamos? Si María habla con mi padre sobre que al final quiere casarse, eso nos incluye a todos, así que prisa- Comenzamos a caminar y agarré el brazo de Carlos para retenerle y le susurré- Cielo, cambia esa carita.-

-No puedo, y más como te miraba.-

-Carlos ya hemos hablado de esto- Me interrumpen-

-¡¡Vamos!!- Era Dani metiendo prisa.-

-¡¡Ya vamos!!- Volví a Carlos- Vamos.-

-Vale, pero si me lo encuentro coqueteando contigo no soy responsable de mis actos.-

Me reí ante el comentario y le cogí de la mano para irnos, pero le solté en seguida porque había mucha gente y podrían ver que estamos juntos.

Buscamos a María y no la encontramos, entramos a palacio a escondidas y ahí estaba ella, en el jardín con David, Jessica y Paula obviamente, que no se separa ni ella de David, ni David de ella, que monos.

Íbamos a ir hacia ella pero Alba se puso en nuestro camino.

Narrado por María

Estaba ya cerca de palacio llorando cuando vi a Paula, Jessica y David, me alegré mucho de verlos, pero aún así no pude dejar de llorar, me empezaron a preguntar, pero antes de nada les di un beso y un abrazo a cada uno.

-Cuanto tiempo sin veros, ¿qué tal os va por aquí?.-

-Pues no se nota que te alegres mucho, ¿qué ha pasado?- Dijo David.-

-Nada, no ha pasado nada, y no me has contestado, ¿qué tal os va?.-

-Nos va muy bien, y encima Jessica se ha echado novio, anda María, vamos a entrar a palacio y nos cuentas que ha pasado, es una orden- Dijo Paula quitándome las lágrima y haciéndome reír.-

-Está bien, y Jessica, no te libras de contármelo- Dije.-

Entramos a palacio y les conté todo lo que había pasado con Dani, y Jessica me contó que estaba saliendo con Blas, nunca los imaginé juntos, pero hacen muy buena pareja.

-No puede ser, Dani jamás te haría eso, él te quiere mucho, seguro que ha sido un malentendido- Dijo Jessica segurísima.-

-¡Qué manía todos con eso! Me ha engañado, lo tengo que aceptar, mi padre tenía razón, tengo que casarme con Gonzalo.-

-María no, vendrán a buscarte y a darte una explicación, escúchala al menos- Dijo David.-

-Les dije que no vinieran y no vendrán, me voy a hablar con mi padre- Dije, me despedí y me di la vuelta para irme pero Jessica me cogió del brazo.-

-Mira, ahí están- Me dijo, me giré y ahí estaban Inés, Carlos, Dani y la chica.-

-No me han hecho caso y encima vienen con esa chica- Dije volviendo a llorar, ví como Alba los paró y empezó a hablar con ellos, y aprovechando eso, me fui al escondite.-

Me gustaría ayudar a Inés a defenderse de Alba y también a Carlos, pero no podía.

¿Por qué no me dejan en paz ya? Me ha engañado, pues que siga con la otra a la que quiere tanto, ahora solo quiero olvidarlo pero no será fácil.

Narrado por Inés

Alba se nos acercó y María se fue, ¿por qué? ¿Me deja sola con esta? Ya le vale.

- Bueno, bueno... Mirad quien aparece por fin- Dijo con tono malvado- ¿Se puede saber dónde has estado en estos 3 días? ¡No llegaste a mi palacio!- Dijo furiosa mirando a Carlos.-

-Alba yo...- Dani interrumpió a Carlos.-

-Ha estado conmigo porque me tenía que ayudar en una cosa.-

-A ti nadie te ha dicho que hable plebeyo- Dijo mirando a Dani con desprecio- Carlos, querido, vamos que hay muchas cosas que hacer antes de la boda- Le tomó de la mano.-

-Suéltame- Dijo Carlos intentando soltarse pero fue imposible.-

-Vámonos amor mío- Le sonrió y se llevó a Carlos a la fuerza.-

-¿Quién es esa?- Preguntó África.-

-Nadie, vamos que hay que encontrar a María, ¿dónde se ha metido?- Dije molesta por lo que acaba de ocurrir.-

-¡¡¡Chicos aquí!!!- Gritó alguien desde el escondite, creo que es David.-

Nos dirigimos allí y estaban los cuatro: Jessica, Paula, David y María.

Entramos y María, al ver a Dani y a África se dio la vuelta dándonos la espalda.

Dani se acercó a ella y le puso las manos en la cintura.

-Dani déjame- Dijo María con la voz quebrada a punto de llorar.-

-No, déjame explicarte lo que viste por favor- María se dio la vuelta.-

-No, no quiero saberlo, creo que las cosas ya están claras- Se secó una lágrima.-

-María, déjame que te explique, yo creía lo mismo que tú y estamos equivocadas, bueno, estás equivocada; además, en estos momento Alba está a solas con Carlos y eso me mata ¿sabes? Tienes delante de ti a Dani, que te quiere y haría lo que fuera por ti y nadie esta detrás de él porque tú le has robado el corazón, y bueno, tu tienes a Gonzalo que os vais a casar, pero Dani no, y podéis huir en cualquier momento- Me empezaron a caer lágrimas- Pero tú y yo conocemos a Alba, sabemos que se casa con Carlos porque sabe que estoy enamorada de él, sabemos que es capaz de no separarse un milímetro de él hasta el día de la boda y ahí sí que no habrá vuelta atrás- No pude más y estallé en llanto- Así que aún estás a tiempo de que Dani te explique todo- Jessica, Paula y África vinieron y me abrazaron.-

Me fui a fuera a ver si dejándolos solos a ver si hablaban, pero la curiosidad me mataba en saber que pasará entre Alba y Carlos.

 

{...}

 

Dani y María salieron con una sonrisa en la cara, creo que lo han arreglado, me alegro muchísimo. Se estaba haciendo tarde y nos fuimos dentro, llegamos al comedor y no había nadie, bueno eran Carlos y Alba como no, pero estaban besándose, nada nuevo... Espera, ¿besándose? ¿Hola? No, esto ya no, esto se está pasando de la raya, no se si el beso lo ha empezado Carlos o lo ha empezado ella, pero lo que está claro es que él no se ha molestado en separarse.

Me fui lo más rápido que pude a fuera de palacio, sin rumbo fijo.

Narrado por María

Vinieron todos al escondite.

Después de lo que me dijo Inés me sentía fatal, no me estaba preocupando nada por ella.

Estaba a solas con Dani, no sabía si escucharlo o no, pero si Inés dijo que lo escuchara y acabó llorando será por algo. Me senté en un rincón.

-Te escucho- Dije mirando al suelo.-

Noté como Dani se iba acercando a mí, se agachó quedando a mi altura y me cogió de la barbilla para que le mirase a los ojos, a esos preciosos ojos azules que tiene, pero esta vez estaban llorando al igual que los míos.

-María, me tienes que creer que esa chica es mi hermana, mi corazón solo te pertenece a ti, te quiero, eres mi vida, te necesito, por favor créeme.-

No me lo podía creer, ¿su hermana? ¿Desde cuando tiene una hermana? En la mirada se nota que decía la verdad. Soy idiota por pensar que me traicionaría, he hecho que los dos sufriéramos por nada, esto sí que no me lo perdonaré, ahora solo necesito abrazarlo, sentir sus brazos rodeando mi cuerpo. Así que no lo dude un segundo y me tiré a sus brazos llorando, él me devolvió el abrazo y me besó, como echaba de menos tener sus labios sobre los míos, esa sensación era única, nos separamos por falta de aire. Nos miramos fijamente, ahora solo sonreímos.

-Perdóname, he sido una idiota por  dudar de ti, pero ¿desde cuando tienes una hermana?.-

-No pasa nada cariño, es normal, pero quiero que sepas que jamás ten engañaré, y respecto a mi hermana, hace tiempo cometimos un error y nos siguen buscando, ahora para ellos le dieron por muerta y me buscan a mi, pero mientras que no estemos juntos no la encontrarán, ni a mi tampoco, por eso nos vemos a escondidas y nadie sabe que tengo hermana.-

-Lo siento Dani, me lo deberías haber dicho, haber confiado en mi, sabes que yo te puedo ayudar a que la veas más a menudo.-

-Ahora eso no importa porque sabes la verdad y nos esperan fuera, y te recuerdo que Inés está bastante mal.-

-Es verdad, vamos.-

Nos besamos y salimos los dos de la mano sonriendo, cuando ví a Inés salí corriendo a abrazarla.

-Lo siento mucho hermanita, ya estoy aquí para ayudarte, lo vamos a solucionar y tú y Carlos seréis felices, ¿vale?- Le dije quitándole las lágrimas de los ojos.-

-¿Has arreglado lo tuyo con Dani?.-

-Sí, gracias por todo, ahora lo importante sois tú y Carlos, vamos.-

Fuimos dentro y al entrar vimos a Alba y a Carlos besarse, Inés salió corriendo, no podía ser, rápidamente se separaron y Carlos se levantó, necesito una explicación, no creo que Carlos haya hecho esto, tiene que haber intervenido Alba. Les dije a África, Jessica, David y Paula que se fueran con Inés y que Dani y yo hablaríamos con Carlos. Y se fueron.

Narrado por Inés

Iba caminando por las calles, sin saber a donde ir pero tampoco me importaba, lo único que quería era desaparecer.

Estaba cansada, así que me senté en el suelo apoyada en un árbol que había en mitad de una pequeña pradera alejada del pueblo.

Cerré los ojos y pensé en lo que había pasado, sin darme cuenta estaba llorando.

-Las princesas no lloran- Me dijo una voz, no sabía quien era, pero seguí tapándome la cara con las manos- Venga, dime que te pasa- Se sentó a mi lado.-

-¿Qué pasa?- Era David.-

-¿Qué te pasa?.-

-¿Es que no lo has visto David?- Dije enfadada llorando aún más.-

-Sí, pero estoy seguro de que todo ha sido un error de Carlos y que Alba empezó el beso o algo.-

-Ya, pero aunque Alba empezara, Carlos no hizo nada para separarse- Dije cabizbaja.-

-En eso tienes razón.-

-Se supone que me tienes que animar, no darme la razón- Me reí.-

-Ya, pero al menos has sonreído.-

-¡¡¡Estáis aquí!!!- Dijeron Paula y África viniendo hacia nosotros.-

-Hola cielo- David besó a Paula-

-David, aquí no, no es el momento- Dijo Paula refiriéndose a mí.-

-No pasa nada- Sonreí.-

-¿Volvemos?- Preguntó Jessica.-

-No- Dije fría.-

-Vamos Inés, no te puedes quedar aquí sola todo el día- Me insistió África.-

-Sí puedo.-

-Pero no te dejaremos- David se levantó y me cogió en brazos.-

-No, ¡¡¡David bájame!!! ¡¡¡David!!!.-

Comenzamos a caminar, bueno, comenzaron porque David no me bajaba ni aunque patalease.

Llegamos a palacio y no quería ver a Carlos, no podía ahora. David por fin me bajó, pero para asegurarse de que “no me escapara” me cogió de la mano.

Entramos y en la entrada estaban María y Dani besándose.

-Ejem...- Tosí y se separaron.-

-¡¡¡Inés!!!- Dijo María abrazándome.-

-Me ahogas- Dije casi sin aire.-

-Perdón, perdón- Rió María.-

-Oye, córtate un poco con tu novio porque igual que te he visto yo, podría verte padre.-

-Jaja, vamos.-

Fuimos al comedor y allí estaban sentados en este orden: Mi padre, Antonio, Carlos, Alba, el padre de Alba, el padre de Gonzalo y Gonzalo.

¿Por qué María me ha traído aquí? Menos mal que los chicos se han quedado fuera.

Cuando entré, al primero que vi fue a Carlos, nuestra miradas se cruzaron pero yo aparté la mía rápidamente, es que era verle y deprimirme.

-¿Qué pasa?- Preguntó María asustada, creo que ella tampoco se esperaba esto.-

-Al fin llegáis, estamos planeando vuestro enlace, será en dos días, todos están de acuerdo, solo faltáis vosotras por aprobarlo- Nos explicó mi padre, espera, ¿todos de acuerdo y solo faltamos nosotras? Vamos, que Carlos está de acuerdo en casarse con Alba en dos días.-

-Y qué más da lo que diga, si nunca tomáis nuestra opinión en cuenta- Dije y las lágrimas empezaron a caerme y fui a mi habitación.-

No me lo puedo creer, todo con Carlos había sido una mentira, él me había usado para llegar hasta Alba y como no, yo como una idiota enamorada de él, no me lo esperaba. Si está de acuerdo en casarse con ella vale, él no me ama, le ama a ella, pues genial, pero yo no podré decirle “Si, quiero” a Antonio teniendo a Carlos delante aunque a él no le importe.

¿Quién diría que se sufriría así por alguien? No puedo más, todo empeora por momentos. Me tumbé en la cama. Jamás había estado así por un chico, ni siquiera cuando estuve con Antonio, es en esos momentos cuando te das cuenta de que amas a una persona, y eso me pasa con Carlos, sin darme cuenta me he enamorado de él.

Me quedé unos minutos pensando, giré la cabeza a mi derecha y lo vi, ví algo perfecto que podría solucionar mis problemas: Una ventana. Fácil, nadie me echaría en falta y es una buena forma de sufrir menos. Me armé de valor, me levanté de la cama y me dirigí a la ventana, la abrí, me puse de pié en el borde y...

jueves, 19 de septiembre de 2013

Capitulo 16


Narrado por María

Fuimos caminando y encontramos una cueva, nos asomamos.

-¿Qué hacéis aquí?- Pregunté.-

-No mojarnos- Dijo Inés.-

-Inés a ti te encanta la lluvia- Sonreí malvadamente- ¿Nos vamos a casa?.-

-Vamos- Dijo Dani.-

Fuimos a casa todos en silencio, era un momento incómodo.

-¿Habéis arreglado ya lo vuestro?- Dije para romper el hielo, aunque no sé si así empeoraría la cosa.-

Carlos e Inés sonrieron y se cogieron de la mano.

-Ya está todo bien- Dijo Carlos sonriendo.-

-Me alegro- Dijo Dani dándoles un abrazo.-

Llegamos a casa y lo primero que hicimos fue cambiarnos ya que íbamos empapados. Inés y Carlos hicieron la comida y yo me quedé con Dani, nadie hablaba así que decidí ir a poner la mesa, y él me ayudó.

Nos sentamos a comer, todos están raros, bueno solo Dani, porque Inés y Carlos en vez de comerse la comida se comían la boca con sus besos, me alegro de que vuelvan a estar juntos, hacen una pareja increíble.

Terminamos de comer y me fui a mi habitación a descansar un poco.

Narrado por Inés

Llegamos a casa y Carlos y yo “comimos” ya María y Dani sí, jaja.

Al terminar estaba agotada, así que me fui a mi habitación y cerré los ojos para ver si me dormía.

Noté como alguien se tumbaba a mi lado y me cogía de la cintura así que me di la vuelta.

-Hola- Dije frotándome los ojos de sueño.-

-Hola- Era Carlos, como no jaja.-

Se acercó mas a mi y juntamos nuestras frentes. Carlos sonríe.

-¿Qué pasa?- Dije sonrojándome.-

-Nada, me gusta mirarte, ¿te molesta?- Dijo con un tono pícaro.-

-No, bueno sí, no me gusta que me miren, me incomoda.-

-Pues conmigo lo tendrás difícil, te miraré todos los días- Me besó con ternura.-

Seguía mirándome.

-¡¡¡Carlos!!!.-

-¿Qué?- Dijo intentando contener la risa, pero no lo consiguió.-

Me reí con él, le acaricio lentamente la mejilla, me coge la mano y me la besa. Nos quedamos mirándonos a los ojos y después de unas cuantas risas, besos y abrazos nos dormimos abrazados.

 

{...}

 

Cuando me desperté él seguía durmiendo, se le ve tan guapo.

Me levanté con cuidado de no despertarle y me fui con María que estaba fuera.

-¡Hola hermanita!- Dije con una sonrisa.-

-¡Hola! Me aburro, ¿te vienes a dar una vuelta?.-

-Claro, ¿y Dani?.-

-No lo sé, vamos- Me cogió del brazo y nos fuimos.

Caminamos por el pueblo hablando un poco de todo, pasamos toda la tarde de acá para allá.

Nos dirigimos al bosque y nos adentramos, nos encantaba ese lugar, oímos una voz que nos resultaba familiar y vimos quien era.

-Te he echado muchísimo de menos- Era Dani con ¿Otra chica? ¿Hola?.-

-Yo también, todo este tiempo separada de ti se me ha hecho durísimo, prométeme que no nos volveremos a separar- Dijo la chica abrazándole.-

María estaba que no cabía en sí del enfado, no nos esperábamos esto de Dani.

-Te lo prometo enana, pero lo importante es que nadie nos vea juntos ni sepa que nos conocemos- Dijo Dani cogiéndole a la chica de la cara con lágrimas en los ojos.-

-Lo sé, nadie se va a enterar- Dijo está con una sonrisa y dándole un beso en la mejilla.-

-A partir de hoy, ya que te quedas aquí, ¿qué te parece si quedamos todos los días aquí y a esta hora?.-

-Perfecto, te quiero Dani.-

-Yo más princesa.-

Antes de que se fueran a abrazar María salió de detrás del árbol.

-¿Así que por eso estabas tan raro?- Dijo María aguantándose las lágrimas pero al final le salieron.-

-Ma... María yo...- Dijo Dani pero María le interrumpió.-

- Tú nada Dani, vete con tu novia pero a mi ya no me digas nada más, no lo quiero saber. Al fin y al cabo mi padre tenía razón y debo estar con Gonzalo no contigo- Dicho esto se fue corriendo.-

-¡María espera!- Iba a salir tras ella pero Dani me agarra del brazo.-

-Inés, déjame al menos que te lo explique a ti y díselo a María, que a ti te escuchará- Dijo Dani llorando.-

-Lo siento Dani, en otro momento porque conozco a María y sé que ahora mismo estará buscando un barco para volver a casa- Me solté- Pero esto no me lo esperaba de ti- Me fui corriendo a ver si alcanzo a María antes de que haga alguna locura.-

Narrado por Inés

Me fui a casa corriendo ya que no quedaba muy lejos, no me puedo creer aún lo de Dani, mi padre tenía razón, Gonzalo es el adecuado. Llegué a casa y Carlos ya estaba despierto pero ni lo saludé.

-¿Qué pasa?- Me dijo preocupado.-

-Nada, soy una gilipollas que no se entera de nada- Le dije entrando a mi habitación recogiendo mis cosas. Al rato entra Inés en la habitación, mis cosas ya casi estaban y me iba a ir.

-María, no te vayas, al menos espera a que Dani te lo explique que seguro que ha sido algún malentendido- Me cogió la mano.-

-No Inés, me ha engañado con otra- Me solté y salí, pero antes de irme- Espero que seas feliz con Carlos, yo me vuelvo a palacio con Gonzalo, pero no diré nada de ti, no te preocupes- Me fui.-

Al salir estaban Dani y Carlos, seguí caminando pero Carlos me cogió y Dani se puso en la puerta.

-No te vayas, Dani me lo ha contado todo y es un malentendido.-

-Me ha engañado- Dije llorando de nuevo intentando soltarme.-

Llegué hasta la puerta y Dani no me dejaba salir.

-O te apartas o me voy por la ventana, elige, pero no quiero volver a verte en mi vida- Dije llorando aún más.-

-No es lo que piensas- Dijo.-

Lo aparté, abrí y me fui. Todos me seguían pero no hice caso, llegué al puerto y ví un barco de esos que llevaba a gente y me subí.

-Adiós hermanita, cuídate y vigila lo que haces- Solté una risita por mi comentario- Te echaré de menos, no te preocupes, con Gonzalo estaré bien- Le dije gritando porque iban a zarpar- Y tú Carlos cuídamela.-

-¡Iremos a buscarte!- Gritaron los dos.-

-¡Ni se os ocurra!.-

Ya estaba muy lejos y no se oía nada de lo que me seguían diciendo, pero oí que Dani decía no se qué de “hermana”, ¿qué querrá decir?

Me daba igual, seguí decidida.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Capítulo 15


Narrado por María

-Está bien Dani, te lo cuento, durante el paseo nos encontramos con Antonio, un antiguo amigo y exnovio de Inés y es el que se va a comprometer con ella, y claro, Inés está confusa aunque yo sé que quiere a Carlos- Le conté a Dani.-

Me abrazó y en ese momento salió Carlos con lágrimas en la cara y fui corriendo a abrazarle.

-¿Qué ha pasado dentro?- Pregunté preocupada.-

-Sigue sintiendo algo por Antonio- Dijo Carlos llorando aún más.- Miré a Dani triste.

-Carlos escúchame, yo sé que Inés te quiere a ti, solo está confusa, déjale pensar, descansa y mañana verás como todo se arregla.-

-Tranquilo tío, Inés te quiere- Le animó Dani.-

Carlos nos abrazó y se fue a dormir.

-Si mañana no se arregla tendremos que hacer algo- Le dije a Dani sentándome y él a mi lado.-

-Se arreglará- Me besó.-

Me levanté.

-Buenas noches feo- Le dije sonriendo.-

-Buenas noches preciosa- Dijo levantándose.-

-Eres mi feo- Sonreí.-

-Eres mi preciosa- Dijo y nos reímos de lo mal que quedaba.-

Fuimos a la habitación cogidos de la mano, me tumbé en mi cama y me arropó como a los niños pequeños y me besó.

-Te quiero.-

-Te amo.-

Y se fue.

 

{...}

 

A la mañana siguiente me levanté y salí al comedor, Inés y Carlos estaban despiertos en el sillón, nadie hablaba, había mucha tensión.

-Buenos días, ¿dónde está Dani?.-

-Está durmiendo- Dijo Carlos seco.-

-Buenos días- Dijo Inés aún con ese tono triste.-

-Voy a despertarlo- Dije yéndome.-

Entré y parecía un angelito durmiendo, me senté en su cama y le susurré al oído:

-Buenos días feo, nos esperan en el salón, la mañana está tensa.-

Abrió los ojos, sonrió y me dio un beso.

-Vamos si no queremos que se maten.-

Salimos al salón.

Narrado por Inés

Desperté y al salir estaba Carlos, nos miramos pero ninguno dijo nada. Desayuné y me senté en el sillón, Carlos me imitó y se sentó a mi lado, pero los dos seguimos sin pronunciar una palabra, se supone que es mi novio y no sé de que hablar con él. Esta noche apenas he dormido pensando en Carlos, me siento fatal, le quiero y me quiere pero... Tal y como estamos ahora las cosas no van bien.

María se levantó y vino, se fue a levantar al vago de Dani y al cabo de poco aparecieron..

-Buenos días- Dijo Dani frotándose los ojos.-

-Hola- Dije cruzada de brazos.-

-¿Qué tal?- Preguntó Dani metiendo la pata, Carlos y yo le miramos con mala cara- Vale, vale, no me matéis.-

Se sentaron junto a nosotros y seguimos sin decir nada, estaba incómoda, así que me fui del salón a dar un paseo.

Estaba nublado.

Me adentré en el bosque y comenzó a llover pero no me importó, me senté apoyando mi espalda en un árbol y me quedé pensando, no tenía previsto volver a casa hasta bien entrada la noche.

Cada vez estaba lloviendo más, pero eso no me detenía. Escuché unos pasos que se acercaban, ¿quién sería? Me levanté y me alejé, quería estar sola.

-¡¡¡Espera!!!- Me gritó aquella persona, no pude reconocer la voz, pero me sonaba.-

Salí corriendo, necesitaba estar sola un rato, me adentré tanto al bosque que me perdí, no sabía por donde ir; los pasos se seguían acercando cada vez más y más.

Corrí como pude y me escondí, me daba igual quien fuera esa persona, esperé y ya no se oía nada fuera así que salí, pero seguía estando en mitad del bosque y aún lloviendo.

-Estás aquí- Dijo la voz, me giré y era Carlos.-

No quiero ver a nadie ahora, ¿qué hace aquí? ¿Por qué me ha seguido? Si en casa no me ha dicho ni una palabra.

Narrado por María

Nos sentamos con ellos e Inés se fue a la calle. Tenían que hablar ella y Carlos cuanto antes.

-Carlos, tienes que hablar con ella, soluciona esto, si la quieres se te ocurrirá algo para que deje de estar confusa y que tenga claro que te quiere a ti- Dije cogiéndole de la mano.-

-No, yo no soy nadie para hacerle cambiar de opinión, ¿Qué quiere casarse con Antonio? Pues que se case, yo intentaré ser feliz con Alba- Dijo Carlos cabreado.-

-Carlos no digas estupideces, todos sabemos que estás enamorado profundamente de Inés, cada vez que estábamos lejos de ellas me repetías una y otra vez cuanto la echabas de menos, así que ahora no me vengas diciendo que ella haga lo que quiera porque sabes que tú no quieres eso- Le dijo Dani, menudas palabras, a Carlos le cambió por completo la cara.-

-Vale, y si es así ¿qué? Si ella no me ama no va a pasar nada.-

-Ella sí te ama, si no lo hiciera no se hubiese escapado para estar contigo- Carlos se llevó las manos a la cabeza.-

-Tenéis razón, he sido un idiota, ¿la sigo? Pero, ¿y si no quiere hablarme?.-

-Inténtalo y no aceptes un no por respuesta.-

-Vale, allá voy- Se levantó y se fue corriendo a buscar a Inés.-

Nos quedamos Dani y yo solos, no sabíamos qué decir.

-¿Desayunamos?- Dijimos a la vez.-

Nos reímos y nos levantamos.

-Tú quieta ahí, yo preparo el desayuno princesa- Dijo con una sonrisa.-

-De eso nada, lo preparo yo.-

-No, yo o si no me enfado- Dijo con voz de niño pequeño y haciendo pucheros.-

-Está bien- Dije riéndome, le besé y me volví a sentar.-

-¿Qué va a tomar la señora? Perdón, ¿señorita?- Dijo haciéndose el educado y le seguí el rollo.-

-Un vaso de leche y crêpes con chocolate.-

-Mmm... ¿Y cómo se hace eso?- Dijo Dani mirando al suelo.-

Empecé a reírme y él se sonrojaba cada vez más, me levanté, lo abracé y le besé.

-Pues que sean tostadas mejor.-

Dani siempre me sacaba una sonrisa con tonterías o simplemente por ser él mismo, por eso me gustaba tanto.

-Marchando- Dijo sonriente y se fue a la cocina.-

Desayunamos y al terminar me bañé y me arreglé, Dani después de mi. No sabíamos que hacer, no parábamos de pensar en Inés y Carlos, todavía no habían vuelto, ¿habría conseguido hablar con ella y volver a estar bien? Pasó el tiempo y no venían, así que fuimos a buscarlos.

Narrado por Inés

Carlos y yo estábamos cara a cara, mirándonos a los ojos, se acercó y me quitó un mechón de pelo mojado de mi cara y se acercó lentamente a mi, estábamos tan solo a unos centímetros de nuestros labios, respirando el aire del otro; se acercó y rompió la poco distancia que quedaba entre nosotros, al principio no seguí el beso, pero después nuestras lenguas peleaban por tomar el control y acabó en empate. Me separé por falta de aire.

-Carlos- Suspiré- ¿Qué quieres?.-

-Quiero hablar contigo, pero está lloviendo mucho, ¿vamos a algún refugio?.-

-¿No te gusta la lluvia?- Dije riendo.-

-Bueno, no me desagrada.-

-Ahora en serio, ¿qué quieres?.-

-¿Tú me quieres?- Dijo directo, pues claro que le quiero, lo amo, ese chico es el que me hace feliz cada día, es más, estoy aquí por él, porque quiero estar a su lado y no separarme ni un segundo, solamente quiero estar entre sus brazos sin preocupación alguna.-

-Claro que si, eres mi novio y lo más importante que tengo en esta vida sin contar a la tonti de mi hermana; quererte no, lo siguiente- Dije pasando mis brazos alrededor de su cuello y él me cogió de la cintura.-

-¿Y por qué tienes dudas con Antonio?.-

-No es que sean dudas, son amores distintos, por mucho que me case con él yo solo quiero estar contigo- Le besé suave y dulcemente, lo que dije es verdad, le quería y mucho, y no tengo dudas; pero al ver a Antonio de nuevo, no se si se despertó algo del pasado, pero no creo que eso me impida ser feliz con Carlos.-

Seguía lloviendo y parecía que no iba a parar, Carlos y yo nos miramos, nos cogimos de la mano y fuimos caminando por el bosque sin rumbo ya que ninguno sabía como volver.

Comenzó a hacer frío y nos metimos en una cueva que había cerca, llegamos, nos sentamos y comenzamos a reírnos sin sentido alguno. Tenía frío así que me encogí un poco, Carlos lo notó y me abrazó fuerte, pus mi cabeza sobre su pecho y pude oír los latidos de su corazón, iban muy acelerados; él notó que lo sentía:

-Mi corazón va así de rápido cada vez que estoy contigo- Alcé un poco la cabeza para mirarle pero sin separarme de su pecho y le sonreí.

Comenzó a acariciarme la cara y me puso la carne de gallina, lo quería tanto...

Me incorporé y le besé, podía sentir su calor, demasiado. Nos fuimos recostando y yo quedé encima de él, nos separamos para coger aire, sonreímos y volvimos al beso, se estaba genial, el fría inmediatamente se convirtió en calor.

Carlos se separó, se giró, se colocó encima de mí y comenzó a besarme apasionadamente, como si no hubiera un mañana. De mis labios bajó lentamente a mi cuello y comenzó a besarlo cuidadosamente, se dirigió a mi oído y me dijo:

-Serás mía pequeña, no permitiré que te separes de mi, te amo- Me susurró y la verdad me agradó oír eso.-

-No me separaré de ti, te amo- Le susurré a oído.-

Siguió besándome poco a poco, me encantaba, este chico sin duda es lo mejor que me ha pasado en la vida.

-¡¡¡Inés!!!- Gritaron desde afuera.-

-¡¡¡Carlos!!!- Gritó otra persona- ¿Dónde estáis?.-

¿Quién sería ahora?

lunes, 9 de septiembre de 2013

Capítulo 14


Al llegar.

-¡¡¡Dani!!! ¡¡¡Qué susto!!!- Grité poniéndome la mano en el pecho- ¿Qué haces aquí?.-

-Vale, vale, no te alegras de verme- Dijo haciéndose el ofendido.-

-Pues claro que me alegro- Le abracé fuerte.-

-Venga, separarse, ya está bien- Dijo Carlos separándonos.-

Dani y yo comenzamos a reírnos.

Narrado por María

Me levanté y bajé a desayunar, Inés y Carlos no estaban y mi padre ya había desayunado, espero que Carlos no se haya ido sin despedirse.

Desayuné y fui rápido a buscarles, no los veía por ninguna parte y pensé que estarían en el escondite para que no los pillaran y allí estaban con... ¿¡Dani!? Salí corriendo y abracé a Dani y nos dimos un largo e intenso beso.

-Por fin nos vemos, te he echado de menos- Dijo Dani.-

-No sabes cuanto necesitaba verte, ¿qué haces aquí?.-

-He venido a verte.-

Lo abracé y fui a despedirme de Carlos.

-Te sacaremos de allí, se fuerte, ¿cuándo te vas?- Dije.-

-Me voy con dos guardias de tu padre, y tranquila que aguantaré por Inés- Dijo dándole un beso en la mejilla.-

-Buenos días por la mañana- Dijo Inés un poco “cabreada”.-

-Lo siento, pero a ti te veo todos los días- Le abracé y le saqué la lengua.-

-Carlos, ¿has dicho que te vas con guardias? Tengo una idea- Dijo Dani pensativo.-

-¿Qué idea?- Saltó Inés, como se notaba que haría cualquier cosa por no separarse de Carlos.-

-¿Seguís teniendo los trajes de guardias del otro día?.-

-SÍ.-

-Perfecto, la idea es...

Narrado por Inés

Dani y sus ideas jaja, pero hay que admitir que son buenas. A saber que se le ha ocurrido esta vez.

-Perfecto, la idea es que Inés, María, os disfrazáis de guardias otra vez y seréis las que acompañen a Carlos al palacio de Alba, de los verdaderos me encargo yo; bueno, estaré a mitad de camino para sacaros y nos iremos los cuatro en barco a una isla cercana de aquí, el barco lo tengo yo desde hace tiempo- Explicó Dani y la verdad no era mala idea.-

-¡Está genial!- Dijo María abrazándole.-

Salimos sigilosos del escondrijo vigilando que nadie nos viera.

-¡Estás aquí! Vamos que es la hora de irse- Le dijo un guardia a Carlos.-

Dani apareció por detrás del guardia y le pegó dejándolo inconsciente, y con el otro hizo lo mismo, me quedé sorprendida. Nos vestimos y nos subimos al carruaje.

El viaje fue normal, hablando de cómo Dani nos sacaría porque no lo sabíamos, Carlos me cogió de la mano, pasó su brazo por encima y me apoyé la cabeza en su pecho. De repente el carruaje se para, creo que es por Dani, se abre la puerta y sí, era él.

Salimos y nos dirigimos al puerto donde estaba el barco, no me creo aún que por fin me vaya a escapar con el chico que quiero, que por fin voy a ser feliz sin que nadie me lo impida.

 

{...}

 

Llegamos a una bonita isla no muy lejos, pero tampoco cerca de la costa, desembarcamos.

Fuimos a dar un paseo y encontramos una casa que no estaba habitada apartada un poco del pueblo, era perfecta, así que nos quedaríamos allí.

Todo era perfecto, llevábamos allí un par de horas pero me sentía bien, me sentía libre. María y yo salimos a dar un paseo.

Íbamos caminando, hablando, riendo y me choqué con alguien.

-Lo... Lo siento mucho- Dije sonrojada.-

-No pasa nada- Me respondió con una sonrisa, el chico era moreno y bastante atractivo- Espera, ¿Inés? ¿María?.-

-Sí, ¿y tú?- Dijo María extrañada, ¿de qué nos conocerá?.-

-¡Qué rápido os olvidáis de mi! ¡Soy Antonio!.-

Me quedé helada, ¿Antonio? ¡Sí que había cambiado! Nos conocíamos desde hace años, éramos mejores amigos hasta que... él y yo empezamos a salir, realmente me gustaba, lo nuestro terminó cuando me tuve que volver a mi palacio y ya no volví a saber nada de él.

-¿Y qué hacéis por aquí?.-

María y yo nos miramos.

-Nada, descansar un poco de todo, ¿y tú?- Dije por si colaba.-

-Vivo aquí jaja, María me he enterado de lo tuyo con Gonzalo, ¿tu padre sigue empeñado en casarte?.-

-Sí...- Dijo María triste.-

-Lo siento, pero no tenemos otra opción, mira, dentro de poco me casaré con alguien que no conozco, se llama Inés, no se quien es- Dijo Antonio para animarme.-

-¿¿¿Mi hermana???- Se sorprendió María.-

-No, se llama igual pero no- Dijo riéndose.-

Me quedé pensando, si yo me caso con alguien que se llama Antonio, y él se casa con alguien que se llama Inés, entonces... ¡Oh, no!

-Pues para mi que sí es mi hermana, porque ella se casa con alguien que se llama Antonio.-

-Pues será jaja, bueno me tengo que ir, nos vemos- Y se fue.-

Yo seguía sin creérmelo, no podía pronunciar ni una palabra.

Narrado por María

Llegamos y la isla era preciosa. No me podía creer que nos hubiésemos reencontrado con Antonio tras tantos años y encima es él quien se compromete con Inés, pero ¿a Inés le sigue pasando algo con él? Ya que está con Carlos...

-Inés, ¿sigues sintiendo algo por Antonio?- Dije yendo directa al grano.-

-No lo sé- Comenzó a llorar y se fue corriendo a la cabaña y al llegar Carlos quiso ir tras ella.

-Espera Carlos- Dije tomando aliento ya que venía corriendo.-

-Rápido que tengo que ir con Inés, ¿a pasado algo entre vosotras?- Dijo serio.-

-Te aconsejo que no vayas, déjala sola un rato hasta que se aclare los pensamientos, y no, entre nosotras no ha pasado nada.-

-¿Qué necesita aclarar? ¿Qué ha pasado?- Dijo a punto de llorar.-

-Siéntate, tranquilízate y te explico- Dije sentándome al lado de Dani y le di la mano.-

-Está bien- Se sentó- Cuéntame.-

-Hemos ido a dar un paseo e Inés ha visto una cosa que le ha hecho recordar cosas del pasado y necesita pensar, por favor, déjala sola, cuando esté mejor te aviso para que vayas a hablar con ella.-

-Está bien, pero no me convence la explicación.-

Me levanté, le di un beso a Carlos en la mejilla y me fui a hablar con Inés.

-Inés tranquila- Dije acercándome a ella- Lo que decida tu corazón es lo que se hará, nada te lo va a impedir, esta noche piensas y decides, pero piensa ¿quién te hace sentir mariposas en el estómago cuando lo ves? ¿Quién te saca una sonrisa? ¿Quién es el que produce ese brillo en los ojos y esa sonrisa tonta cuando escuchas su nombre o lo ves?- Dije para animarla.-

-¿Te refieres al brillo y la sonrisa que te sale al estar con Dani y ahora que acabo de decir su nombre?.-

Me sonrojé y asentí.

-Pues sí que estás enamorada.-

No pude evitar reírme y ella sonrió.

-¿Me brillan los ojos con Antonio?- Preguntó preocupada.-

La verdad es que sí, y ahora al decir su nombre le ha salido la sonrisa, pero con Carlos se le nota mucho más, sin duda Carlos es su chico.

-No me fijé- Mentí.-

-¿Y con Carlos?.-

-Con Carlos se te ponen preciosos- Dije sonriendo- Y por cierto, quiere verte y saber que pasa.-

-Bueno te haré caso y pensaré esta noche, muchas gracias- Me abrazó- Dile que pase.-

Le di un beso en la mejilla y salí a avisar a Carlos.

-Carlos, alguien quiere verte- Dije sonriente.-

Carlos se levantó, me dio las gracias y entró con Inés, yo me senté al lado de Dani y le abracé.

-¿Qué ha pasado? Dime la verdad, te conozco y sé que aunque Carlos no se haya dado cuenta le has mentido, puedes confiar en mi, cuéntamelo.-

Eso era malo, que si me pasaba algo él se daba cuenta en seguida, me conocía demasiado en poco tiempo, pero confiaba en él, quizá me ayude a ayudar a Inés.

Narrado por Inés

Pff... Las palabras de María me han ayudado, pero aún así sigo hecha un lío. Alguien llamó a la puerta.

-¿Se puede?- Es Carlos.-

-Pasa- Dije desanimada.-

Entró, se sentó al borde de la cama y me acarició la cara.

-Inés, ¿qué te pasa? Estás rara- Me preguntó con cara triste.-

Suspiré.

-Pues... Nada, mañana se me pasa.-

-Cielo, a mi no me engañas- Se tumbó a mi lado- Cuenta.-

-Me arrepentiré pero... Cuando he ido a dar un paseo con María nos hemos encontrado con Antonio, un amigo nuestro de la infancia y mi novio de pequeños, y me he enterado de que es con él con quien me caso- Dije a punto de llorar otra vez.-

Carlos me acarició el brazo de arriba abajo y se me puso la carne de gallina.

-¿Sigues sintiendo algo por él?- Me preguntó serio con alguna que otra lágrima.-

Me lo pensé dos veces.

-No lo sé Carlos, no lo sé- Dije sintiéndome muy culpable.-

-Vale- Se levantó, me dio un beso en la frente y se fue.-

¿Acabo de hacer eso? ¿Le he dicho a mi novio que no sé si siento algo por mi antiguo novio? Inés, eres tonta, joder no tienes que tener dudas, quieres a Carlos y ya está, no te compliques más la vida; pero por otro lado... Al ver de nuevo a Antonio... ¡Que no! Estoy con Carlos pff... Se supone que si le quiero no tengo que tener dudas, pero es que yo a Carlos lo amo... Y al final pensando y pensando me quedé profundamente dormida, quería que este día pasara ya.

Capítulo 13


En ese momento apareció Alba.

-Espera, ¿vosotros dos estáis...? ¡Anda! Pues esto cambia un poco la cosa- Pone cara malvada.-

-Alba, por favor no digas nada- Suplicó María.-

-No, tranquila si no diré nada- Suspiré de alivio- Pero esto cambia mi decisión de si casarme con él o no- Se dirigió a Carlos- Querido, nos vemos en la boda.-

¡Lo sabía! Se acabó, no aguanto más, iba a ir a por ella pero María y Carlos me cogen del brazo.

-¡Queréis soltarme!- Grité furiosa.-

-Inés no entres en su juego por favor- Me pidió Carlos.-

Me solté bruscamente y volví hacia donde estaba mi padre.

-Llegas en el momento justo, os iba a mandar a llamar- Aparecieron los demás- Bueno, hemos llegado a un acuerdo, sentarse- Dijo mi padre.-

-La boda se realizará siempre que Alba esté de acuerdo- Genial, ahora que Alba me ha visto besarme se casa, muy bien- Y en ese caso, las bodas serían en vuestro castillo- Explicó el padre de Albar.-

Espera, espera, ¿bodas? ¿Qué bodas? Que yo sepa solo hay una.

-¿Qué bodas?- Pregunté confundida.-

-La de Alba y Carlos, María y Gonzalo, Antonio y tú- Explicó mi padre- Y respecto al otro chico, Dani, no quiero correr riesgos, va a ser desterrado- Se dirigió a María- No puedo permitir que lo vuestro vaya más allá, entiéndeme.-

-Bueno Alba, hija mía, ¿quieres casarte con este muchacho?.-

-Sí padre, lo estoy deseando- Me miró con cara vengativa, seguro que se quiere vengar por lo de Gonzalo cuando le gustaba que María se lo quitó y quiere pagarlo conmigo y Carlos, ¡no puedo más!.-

-Bien, pues ya acordaremos la fecha en otro momento.-

La tarde pasó lenta, pero por fin llegó el momento de volver a casa.

 

{...}

 

Al llegar.

-Carlos, hasta el día del enlace te alojarás aquí, en el cuarto de invitados- Comentó mi padre- Eso sí, Inés como te encuentre en la habitación de Carlo o Carlos, como te encuentre en la habitación de Inés, las cosas no serán buenas para ninguno de los dos, tenedlo presente- Y se fue.-

Estoy feliz, Carlos se queda, sé que si nos pillan juntos las cosas no serán buenas, pero le veré todos los días, dormiré bajo el mismo techo que él... Pero aún así no puedo estar con él y eso me mata.

-Inés, despierta- Era María.-

-Que.-

-Alégrate, que Carlos se queda- Le miré y le sonreí, me devolvió la sonrisa.-

-Ya, pero no podré estar con él.-

-Yo no diría eso. Dijo Carlos sonriendo.-

-Tú mismo has oído lo que dijo mi padre- Dije cruzándome de brazos.-

-Sí, pero ha dicho que no estemos tú en mi habitación ni yo en la tuya, no ha dicho nada del resto de habitaciones de palacio- Entendí lo que dijo y tenía razón, la cara se me iluminó por completo, ahora sí que irían “bien” las cosas.-

Narrado por María

Estoy feliz por Inés, su chico se queda en el castillo pero Dani... Dani no está y se me hunde el mundo pensando en que no lo voy a volver a ver. Estaba en nuestro escondite, había dejado a Inés y a Carlos solos en el jardín, menos mal que mi padre no está presente, necesitaba estar sola, despejarme, pensar... Pensé en que no aguantaría lo más mínimo sin Dani, salí porque se acercaba la hora de cenar y no quería que buscándome me encontrasen aquí. De Camino me encontré con Carlos e Inés.

-¿Dónde te habías metido?- Dijo Inés.-

-Estaba dando una vuelta- sonreí falsamente, no quería que se preocupase por mí ahora que más o menos estaba bien.-

-Vale, entonces vamos a cenar- Dijo Carlos sonriente.-

-Tú siempre pensando en comida, ¿no?- Dijo Inés besándolo.-

Sonreí y nos fuimos a cenar. Mi padre estaba en el comedor esperándonos.

-Por fin llegáis, todavía ninguno me ha dado las gracias por el compromiso- Dijo.-

-Ni te las voy a dar, solo agradezco que dejes a Carlos quedarse aquí y que liberases a Dani, por eso sí, muchas gracias- Dije un poco triste acordándome de Dani.-

-¿No estás contenta por comprometerte con un caballero como Gonzalo?.-

-¡Tú ya sabes a quién quiero! ¡Y no es a Gonzalo!- Me levanté enfadada y me fui a mi habitación.-

Me tumbé en la cama llorando y me quedé dormida.

 

{...}

 

A la mañana siguiente...

Narrado por Inés

El día pasó rápido, llegó la hora de cenar y no fue justo como me esperaba, María se fue cabreada y nos dejó a Carlos, mi padre y a mi solos. Un incómodo silencio se adueñó de la situación en casi toda la cena.

-Y bien....- Tosió mi padre rompiendo el silencio- ¿Alguien más que opine lo mismo que María?- Carlos y yo nos miramos pero no dijimos nada- Bien.-

Llegó un guardia de mi padre y le entregó una carta, la leyó y miró a Carlos, ¿Qué pasará?
-Carlos, recoge tus cosas que mañana a primera hora saldrás en dirección al palacio de Alba- Ordenó mi padre.-
-¿Y eso?- Preguntó Carlos preocupado mirándome.-
-Alba prefiere que estés con ella hasta el día de la boda porque no se fía y así será.-
Miré a Carlos, me levanté sin decir nada y me fui corriendo a mi habitación, allí me encontré a María durmiendo. Me acosté sin despertarla y comencé a llorar hasta que finalmente caí rendida y me dormí.
 
{...}
 
A la mañana siguiente me levanté a primera hora ya que quería estar con Carlos antes de que se fuera, desperté a María, bajamos y allí estaba Carlos con las cosas listas y mi padre al lado.
-Que temprano os levantáis- Se sorprendió mi padre al vernos y se dirigió a Carlos- Carlos, yo no iré contigo, irás con dos de mis guardias que te acompañarán todo el trayecto.-
-Vale- Dijo Carlos seco.-
Mi padre se fue.
Miré a Carlos triste, el me iba a abrazar pero me aparté.
-¿Qué pasa?- Preguntó triste.-
-Aquí no, ven- Le cogí de la mano y lo llevé a nuestro escondite.-
Al llegar...