lunes, 9 de septiembre de 2013

Capítulo 13


En ese momento apareció Alba.

-Espera, ¿vosotros dos estáis...? ¡Anda! Pues esto cambia un poco la cosa- Pone cara malvada.-

-Alba, por favor no digas nada- Suplicó María.-

-No, tranquila si no diré nada- Suspiré de alivio- Pero esto cambia mi decisión de si casarme con él o no- Se dirigió a Carlos- Querido, nos vemos en la boda.-

¡Lo sabía! Se acabó, no aguanto más, iba a ir a por ella pero María y Carlos me cogen del brazo.

-¡Queréis soltarme!- Grité furiosa.-

-Inés no entres en su juego por favor- Me pidió Carlos.-

Me solté bruscamente y volví hacia donde estaba mi padre.

-Llegas en el momento justo, os iba a mandar a llamar- Aparecieron los demás- Bueno, hemos llegado a un acuerdo, sentarse- Dijo mi padre.-

-La boda se realizará siempre que Alba esté de acuerdo- Genial, ahora que Alba me ha visto besarme se casa, muy bien- Y en ese caso, las bodas serían en vuestro castillo- Explicó el padre de Albar.-

Espera, espera, ¿bodas? ¿Qué bodas? Que yo sepa solo hay una.

-¿Qué bodas?- Pregunté confundida.-

-La de Alba y Carlos, María y Gonzalo, Antonio y tú- Explicó mi padre- Y respecto al otro chico, Dani, no quiero correr riesgos, va a ser desterrado- Se dirigió a María- No puedo permitir que lo vuestro vaya más allá, entiéndeme.-

-Bueno Alba, hija mía, ¿quieres casarte con este muchacho?.-

-Sí padre, lo estoy deseando- Me miró con cara vengativa, seguro que se quiere vengar por lo de Gonzalo cuando le gustaba que María se lo quitó y quiere pagarlo conmigo y Carlos, ¡no puedo más!.-

-Bien, pues ya acordaremos la fecha en otro momento.-

La tarde pasó lenta, pero por fin llegó el momento de volver a casa.

 

{...}

 

Al llegar.

-Carlos, hasta el día del enlace te alojarás aquí, en el cuarto de invitados- Comentó mi padre- Eso sí, Inés como te encuentre en la habitación de Carlo o Carlos, como te encuentre en la habitación de Inés, las cosas no serán buenas para ninguno de los dos, tenedlo presente- Y se fue.-

Estoy feliz, Carlos se queda, sé que si nos pillan juntos las cosas no serán buenas, pero le veré todos los días, dormiré bajo el mismo techo que él... Pero aún así no puedo estar con él y eso me mata.

-Inés, despierta- Era María.-

-Que.-

-Alégrate, que Carlos se queda- Le miré y le sonreí, me devolvió la sonrisa.-

-Ya, pero no podré estar con él.-

-Yo no diría eso. Dijo Carlos sonriendo.-

-Tú mismo has oído lo que dijo mi padre- Dije cruzándome de brazos.-

-Sí, pero ha dicho que no estemos tú en mi habitación ni yo en la tuya, no ha dicho nada del resto de habitaciones de palacio- Entendí lo que dijo y tenía razón, la cara se me iluminó por completo, ahora sí que irían “bien” las cosas.-

Narrado por María

Estoy feliz por Inés, su chico se queda en el castillo pero Dani... Dani no está y se me hunde el mundo pensando en que no lo voy a volver a ver. Estaba en nuestro escondite, había dejado a Inés y a Carlos solos en el jardín, menos mal que mi padre no está presente, necesitaba estar sola, despejarme, pensar... Pensé en que no aguantaría lo más mínimo sin Dani, salí porque se acercaba la hora de cenar y no quería que buscándome me encontrasen aquí. De Camino me encontré con Carlos e Inés.

-¿Dónde te habías metido?- Dijo Inés.-

-Estaba dando una vuelta- sonreí falsamente, no quería que se preocupase por mí ahora que más o menos estaba bien.-

-Vale, entonces vamos a cenar- Dijo Carlos sonriente.-

-Tú siempre pensando en comida, ¿no?- Dijo Inés besándolo.-

Sonreí y nos fuimos a cenar. Mi padre estaba en el comedor esperándonos.

-Por fin llegáis, todavía ninguno me ha dado las gracias por el compromiso- Dijo.-

-Ni te las voy a dar, solo agradezco que dejes a Carlos quedarse aquí y que liberases a Dani, por eso sí, muchas gracias- Dije un poco triste acordándome de Dani.-

-¿No estás contenta por comprometerte con un caballero como Gonzalo?.-

-¡Tú ya sabes a quién quiero! ¡Y no es a Gonzalo!- Me levanté enfadada y me fui a mi habitación.-

Me tumbé en la cama llorando y me quedé dormida.

 

{...}

 

A la mañana siguiente...

Narrado por Inés

El día pasó rápido, llegó la hora de cenar y no fue justo como me esperaba, María se fue cabreada y nos dejó a Carlos, mi padre y a mi solos. Un incómodo silencio se adueñó de la situación en casi toda la cena.

-Y bien....- Tosió mi padre rompiendo el silencio- ¿Alguien más que opine lo mismo que María?- Carlos y yo nos miramos pero no dijimos nada- Bien.-

Llegó un guardia de mi padre y le entregó una carta, la leyó y miró a Carlos, ¿Qué pasará?
-Carlos, recoge tus cosas que mañana a primera hora saldrás en dirección al palacio de Alba- Ordenó mi padre.-
-¿Y eso?- Preguntó Carlos preocupado mirándome.-
-Alba prefiere que estés con ella hasta el día de la boda porque no se fía y así será.-
Miré a Carlos, me levanté sin decir nada y me fui corriendo a mi habitación, allí me encontré a María durmiendo. Me acosté sin despertarla y comencé a llorar hasta que finalmente caí rendida y me dormí.
 
{...}
 
A la mañana siguiente me levanté a primera hora ya que quería estar con Carlos antes de que se fuera, desperté a María, bajamos y allí estaba Carlos con las cosas listas y mi padre al lado.
-Que temprano os levantáis- Se sorprendió mi padre al vernos y se dirigió a Carlos- Carlos, yo no iré contigo, irás con dos de mis guardias que te acompañarán todo el trayecto.-
-Vale- Dijo Carlos seco.-
Mi padre se fue.
Miré a Carlos triste, el me iba a abrazar pero me aparté.
-¿Qué pasa?- Preguntó triste.-
-Aquí no, ven- Le cogí de la mano y lo llevé a nuestro escondite.-
Al llegar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario