Capítulo 18

Narrado por María

-Padre, no estoy de acuerdo- Dije y fui tras Inés haciéndole un gesto a Carlos de que luego hablaríamos, me tiene que explicar todo esto.-

Llegué a la habitación, Inés estaba tumbada en la cama llorando, me acerqué.

-Inés, no llores, no dejes que se salga con la suya, no dejes que te haga sufrir de esta manera, olvídalo y sé feliz.-

-No puedo- Dijo entre lágrimas y sollozos.-

-Descansa un rato, vendré luego y todo se arreglará y serás feliz, no te preocupes.-

Salí de la habitación dispuesta a hablar con Carlos y al fin lo ví, estaba con Alba pero no me importa, me acerqué a ellos.

-Carlos, ¿podemos hablar?.-

-Claro.-

-Tú no tienes nada de que hablar con mi prometido, así que te estás yendo- Dijo Alba antipáticamente.-

-Tengo y quiero hablar con él quieras o no- Cogí a Carlos del brazo y me lo llevé lejos de Alba.-

Alba intentó retenerme pero no pudo, llegamos a la fuente del jardín y me aseguré de que no hubiera nadie cerca.

-¿Qué narices estás haciendo con Alba?.-

Carlos se quedó en silencio mirando al suelo mientras le caían lágrimas de sus ojos.

-María, sabes que yo amo a Inés pero... Pero Alba dice que si no me caso con ella y no estoy lejos de Inés, ella... Ella le hará algo que no me dijo que sería, pero por su cara será malo, y entiéndeme, no puedo permitir que Inés sufra.-

Lo abracé.

-Será cabrona... No te preocupes, Dani y yo pensaremos algo y os sacaremos de esta, todo va a salir bien, Inés tiene que saber la verdad, está sufriendo mucho con todo esto.-

-Gracias María, no sabes como me gustaría hablar con ella, estar con ella, reír con ella, besarla, abrazarla...- A Carlos se le iluminó la cara diciendo eso- Pero si Alba nos descubre lo pagará ella y no quiero ponerla en esa situación, por favor, explícaselo tú.-

-Lo haré, no te preocupes, dentro de nada estaréis juntos otra vez sin Alba en medio- Lo abracé y le besé la mejilla.-

Me levanté y me dirigí a buscar a Dani para explicarle todo a ver si se le ocurría algo. No sé si se habrá ido puesto que está desterrado y aquí lo pueden pillar. Lo ví sentado en un banco del jardín, por suerte no había nadie, parecía triste, me acerqué, me miró y agachó la cabeza.

Narrado por Inés

Estaba a punto de cometer una locura en la ventana, pero a parte de que lo pensé dos veces, escuché unos pasos acercarse.

Me acosté rápidamente en la cama y observé a María entrar en la habitación.

Le agradezco muchísimo que intente consolarme aunque fuera difícil, por no decir imposible.

Se fue a buscar a Carlos y yo mientras decidí no hacer ninguna locura y dormir un poco.

 

{...}

 

Me desperté, ¿qué hora era?

Me levanté poco a poco, estaba más tranquila, salí de la habitación y pensé en ir a buscar a María.

Iba caminando lentamente por los pasillos del piso de arriba porque iba un poco adormilada, noté que alguien me seguía pero no le dí importancia pensando que eran imaginaciones mías y no sería nada. Me disponía a bajar las escaleras cuando siento unas manos en la espalda empujándome hacia adelante cayendo escaleras abajo.

-¡¡¡Aaaaaaaaaaah!!!- Grité, cuando sentí que había parado de caer, al estar mi cuerpo completamente en el suelo, perdí la noción y lo ví todo negro.

Narrado por Antonio

Se acabó, yo ya sé perfectamente que entre Inés y ese tal Carlos hay algo, se creen que no les ví besándose en el bosque el otro día, pero una cosa la tengo clara, si yo no puedo estar con ella, nadie lo hará, ni siquiera Carlos.

No puedo correr riesgos, y por mucho que me duela no voy a dejar que sigan con esto. Estaba pensando en algo que hacer cuando ví a Inés, perfecto, luego iré a por María, ahora no puedo perder esta oportunidad.

La seguí sigilosamente, estaba adormilada y eso me daba ventaja. Parecía en algunos momento que me iba a descubrir porque se giraba, pero afortunadamente todo salió bien.

Se dirigió a las escaleras, este es mi momento y no lo desaprovecharé, puse mis manos en su espalda y la empujé fuertemente para que se cayera.

-¡¡¡Aaaaaaaaaaah!!!- Gritó mientras caía.-

Cuando se paró estaba inconsciente, no hice nada, solté una leve risa malvada y me aleje como si no hubiera visto nada.